Por Ana Fuentes
En uno de los resúmenes televisivos de 2020, una enfermera española, agotada, decía a cámara: “Este año nos ha tocado ser fuertes; a ver si en 2021 nos toca ser felices”. La pandemia ha transformado la escala de prioridades de gran parte de la humanidad. Y está acabando con la ambición. Hemos tenido la suerte de llegar vivos hasta aquí. Ahora, ¿cómo vamos a vivir?
Es razonable rebajar las expectativas porque a la mayoría de los ciudadanos se le han reducido las opciones. Por mucho que...