Por Felipe Úsuga Pérez
Universidad Pontificia Bolivariana
Ciencias Políticas, semestre 6
felipeuspe@gmail.com
La guerra, la peste y la hambruna, tres milenarios dolores de cabeza, se han superado a grandes rasgos, con rezagos -como esta pandemia y el atraso en la lucha contra la pobreza que trajo consigo- pero sin sus magnitudes pasadas. Así, dice el historiador y filósofo israelí Yuval Noah Harari, el mundo parece entrar a una era en la que sus grandes búsquedas son vencer la muerte, alcanzar la felicidad y adquirir supercapacidades. La humanidad parece más capaz que nunca.
Esta nueva agenda avanza más rápido que nuestra comprensión de ella. Como explica Harari, los algoritmos, la inteligencia artificial o la inteligencia de macrodatos son cada vez más relevantes en la toma de decisiones tan variadas como elegir la rutina de ejercicio del día, elegir una profesión, diseñar políticas de seguridad ciudadana, o combatir la pandemia misma.
La inteligencia humana se rezaga frente a la cada vez más avanzada inteligencia artificial, y la recolección de mayores cantidades de datos para alimentarlas solo aumentará, nos demos cuenta o no. Podemos poner este proyecto al servicio de objetivos como la seguridad ciudadana, la reducción de la pobreza, la protección de los derechos humanos en escenarios complejos, y el mejoramiento de las condiciones de vida. O podemos poner los grandes avances de la tecnología y los datos al servicio de intereses particulares y alejados de la ética, y así reducir una prometedora apuesta a proyectos de vigilancia masiva, nuevos delitos informáticos, agresividades geopolíticas, y violaciones a la esfera individual.
Afortunadamente, estamos a tiempo de reflexionar sobre la dirección que daremos a la convergencia de nuevas tecnologías biológicas y artificiales, y algunos temas recientes -como la Cuarta Revolución Industrial o el uso de inteligencia artificial para el combate contra la pandemia- son una oportunidad para pensar el alcance ético y democrático que daremos a estos nuevos avances en Colombia.
*Taller de Opinión es un proyecto de
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