Tenemos dificultades en esta Tierra por múltiples razones y una es elegir mal a quienes nos gobiernan.
Aunque a la fecha se han descubierto 4122 planetas en otras estrellas, ninguno es parecido a la Tierra. Todos son inalcanzables.
No todos creen esto último. El fallecido físico Stephen Hawking se unió meses antes de morir al proyecto Braekthrough Starshot, que busca enviar mininaves a la estrella más cercana, Alfa Centauri, viaje que duraría de 20 a 30 años. Pasaría también por el planeta Proxima Centauri b, ahí cerca. ¿Será afín a la vida?
Hawking, sin embargo, en su libro póstumo Breves respuestas a las grandes preguntas, planteó que tal vez los humanos colonicemos otros mundos pero con máquinas. Robots que resistirían lo que nosotros no. Para él, la humanidad no tiene escapatoria en el lugar que habita hoy debido a amenazas, como el calentamiento global.
Hoy, en una especie del juego infantil de la rayuela, pensamos en dar un brinco a la Luna y luego a Marte, con enviados de carne y hueso, pero el universo no parece jugar a nuestro favor.
Michel Mayor, astrofísico, fue uno de los físicos galardonados este año con el Nobel. Su gran aporte: haber descubierto, con un colega, el primer planeta alrededor de otro sol.
Conocedor al dedillo de esos mundos, fue lapidante la semana pasada: “las cosas deben quedar claras: no migraremos a ellos”.
Las distancias son tan grandes que es aventura imposible con la tecnología actual. Si se encontrara un planeta habitable a pocos años luz, solo podríamos contentarnos como un moribundo en el desierto que cree ver un oasis en la lejanía o el náufrago en isla desierta que ve pasar un barco a lo lejos.
Si existiera una física que nos permitiera llegar a esos oasis planetarios, no la conocemos, dice otro astrofísico, Stephen Kane, de la Universidad de California.
Encerrados en nuestra casa y afuera un gran incendio que nos rodea: emisiones de carbono, deforestación, agotamiento de recursos, extinción de especies, aumento del nivel del mar, acidificación de los océanos, plastificación del planeta. Solo nos queda apaciguar esa gran amenaza porque no hay otra Tierra posible.
Estamos llenos de políticos que desconocen esa problemática o que con sus decisiones la empeoran, perjudicándonos a nosotros y las generaciones por venir.
Piense bien su voto, no lo bote al relleno sanitario. La del domingo es una opción para cambiar nuestra historia local y nacional en este tema vital.
Maullido: todavía amenazándonos con el castrochavismo. Sí que andan mal.