No tendría que tomarse una pastilla ni aplicarse parche alguno. No: 15 minutos de ultrasonido bastarían.
Científicos de la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill expusieron los testículos de ratas a dos sesiones de 15 minutos de ultrasonido y encontraron que los niveles de espermatozoides se redujeron a niveles asociados con infertilidad en humanos.
El artículo fue publicado en Reproductive Biology and Endocrinology.
Pese al éxito, la técnica está lejos de ser usada, aunque muestra otro camino hacia la ansiada contracepción masculina.
No es claro, por ejemplo, si podría haber un daño permanente tras dosis repetidas de radiación. Además los espermatozoides deben ser eliminados del todo, no solo dañados, pues un espermatozoide dañado puede producir un bebé con defectos.
"Lo último que queremos es un daño permanente a los espermas", expresó Allan Pacey, experto consultado por la BBC.
Para James Tsuruta, cabeza de la investigación, se necesitan más estudios para determinar cuánto dura el efecto.
El ultrasonido mostró ser más efectivo al aplicarse en los testículos con intermedio de dos días y a través de agua tibia salada.
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