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Los primates, nuestros parientes más lejanos, tuvieron su paraíso en Colombia hace cinco millones de años. Así lo confirma el paleontólogo Bruce MacFadden, curador de vertebrados del Museo de Historia Natural de Florida, profesor de biología, ciencias sociales y estudios latinoamericanos.
Durante su visita esta semana a Medellín, invitado por el Parque Explora, el investigador habló de las primeras especies de mamíferos que poblaron las Américas, y del intercambio que se dio cuando surgió el istmo de Panamá, que el denomina "el puente" entre Norte y Suramérica.
Refiere con nostalgia la cantidad de especies extintas, entre ellas los megaterios (perezosos gigantes) y taxodontes (notoungulados), tigres dientes de sable, monos y caballos.
"En Colombia hay muchos afloramientos de restos de monos hallados en La Venta, en el desierto de la Tatacoa. Es un lugar seco y árido que permite que haya más afloramientos para estudiar los fósiles. Cuando hay mucho bosque resulta difícil para estudiar porque no hay afloramientos. Tenemos registros en esta parte de Colombia con fósiles de 10 millones de años de primates y otros notoungulados, roedores gigantes, murciélagos antiguos y también los primates, los monos de bosques tropicales", explica el paleontólogo.
Agrega, además, que sin lugar a dudas no hay otro sitio en todo Suramérica con un registro mayor de especies de primates. "Hay una gran diversidad. En total son más o menos 10 especies distintas".
El estudio de los fósiles, ese que nos transporta en el tiempo, es el que nos permite ahora replantear nuestros orígenes. Sin irnos hasta la época de los dinosaurios ("extintos globalmente hace 65 millones de años por el cataclismo que ocasionó un meteoro"), por nuestras montañas y llanuras, desiertos y altiplanos, grandes mamíferos reinaban a sus anchas.
La historia que nos han presentado, en la que afirman que fueron los conquistadores españoles quienes trajeron los primeros caballos a América no es cierta. Al menos no del todo, precisa Bruce MacFadden. "El verdadero origen de los equinos se remonta a Norteamérica, centro de su evolución, hace 55 millones de años".
Explica entonces que los caballos estaban hasta más o menos el final de la Era del Hielo (55 millones de años hasta 10.000 años). Tenemos un registro amplio de este grupo de caballos en América del Norte, en zonas como Nebraska, California, Wyoming y Texas.
"Luego de la formación del puente, hace cinco millones de años, los caballos cruzaron este camino y entraron a Suramérica. En el Nuevo Mundo los caballos se extinguieron al final de la Era del Hielo, hace 10.000 años. Es luego cuando se da una reintroducción, hace 500 años, con los conquistadores", afirma MacFadden, autor de un libro científico sobre caballos, publicado por la Universidad de Cambridge, en Inglaterra.
Sobre las causas de extinción, que solo nos dejan historias y dibujos de los antepasados que por aquí estuvieron, el investigador norteamericano refiere dos en particular: la competencia de otros grupos de mamíferos más avanzados y con mejores adaptaciones a un lugar, y los cambios de clima. A ellas se suma hoy el Homo sapiens, el gran depredador.