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HISTÓRICO
Los privilegiados de Une
Por JOSÉ F. LOAIZA BRAN Y PAULA COLORADO CH. | Publicado
Ajustes a los perfiles para acceder a cargos directivos, licencias remuneradas hasta alcanzar la jubilación, millonarias bonificaciones por renunciar, salarios atractivos y beneficios extralegales contrastados con cifras negativas en las utilidades tienen a una serie de funcionarios de Une en el centro de una controversia.

La llegada de María Luisa Escolar Sundheim , el 2 de noviembre de 2010 como directora de Ventas Corporativas, es uno de los casos más cuestionados. Una investigación adelantada en la empresa y un proceso que sigue la Unidad de Vigilancia de la Conducta Oficial de la Personería de Medellín, dan cuenta de que debido a su experiencia se le homologó un título de posgrado y más tarde se comprobó que ni siquiera contaba con el de Economista, que dijo haber obtenido de la Universidad de Los Andes.

"Considerando que la empresa había sido inducida en un error y sin posibilidad de tomar medidas inmediatas ya que la funcionaria se encontraba en periodo de gestación, la Gerencia de Gestión Humana presentó el 2 de mayo del 2011 denuncia penal ante la Fiscalía General de la Nación y, el 4 del mismo mes y año, queja disciplinaria ante la Procuraduría General de la Nación", señaló al respecto Horacio Vélez De Bedout , en su momento presidente de Une, en carta al concejal Bernardo Alejandro Guerra.

El caso está en investigación y no hay un fallo judicial al respecto. Las directivas actuales de Une sostuvieron que el asunto ya es bastante conocido por todos y que no tienen nada más que agregar.

Guerra Hoyos, actual presidente del Concejo de Medellín, sostuvo que tiene conocimiento de otros funcionarios que accedieron a importantes cargos en la empresa sin reunir los requisitos necesarios y en la actualidad continúan trabajando. Todos ellos ganan salarios mensuales por encima de los 10 millones de pesos.

"Hay funcionarios que para su cargo necesitan especialización y en uno o dos días les cambian el manual de funciones, y hay otros a los que les han aceptado, en lugar de especialización, programas de gerencia", reparó.

Un documento de la Personería señala que se sigue un proceso disciplinario por "presuntas irregularidades en las vinculaciones de personal y ascensos sin el cumplimiento de los procedimientos de selección estatuidos por la entidad, además de permitir el ingreso de personas sin la observancia de la totalidad de los requisitos objetivos para ocupar el empleo".

Para el gerente de Gestión Humana, Alfonso León Ossa Gómez, sobre quien recae el proceso junto a la abogada Ligia Mercedes Rengifo Henao , testigo en la firma de varios de los contratos, la explicación está en que en la creación de Une se conservó la normatividad vigente para EPM.

"En EPM existe un decreto que permitía que cuando la persona no tiene posgrado se homologara esto con años de experiencia. Cuando se integran Orbitel y Emtelco a Une se aplicó esa normatividad", observó.

Cobrando desde la casa
Bajo la mirada de la Personería hay otro proceso contra el expresidente de Une, Horacio Vélez De Bedout, el Gerente de Gestión Humana, y el secretario General, Juan Guillermo Usme Fernández, por "presuntas irregularidades en el otorgamiento y pago de unas licencias remuneradas a los señores Álvaro Vélez Blandóny Álvaro Duque Arango ".

El acuerdo de licencia remunerada para Vélez Blandón, vicepresidente de Servicio al Cliente, y Duque Arango, subdirector de Gestión, con salarios que superan los 30 y los 15 millones de pesos, respectivamente, fue pactado hasta que cada uno alcanzara la jubilación, lo que se dio el pasado 31 de diciembre.

El Gerente de Gestión Humana explicó que la situación surgió de la supresión del área en que laboraban, por recomendación de un consultor externo.

"Había varias opciones para los funcionarios que ya no tenían lugar en la organización. La indemnización resultaba mucho más alta que la renta programada, que costó por lo menos el 50 por ciento", señaló Ossa.

Bonificaciones millonarias
A estos casos controvertidos se suman 11 bonificaciones pagadas a igual número de servidores en el momento de su retiro de la compañía. Aunque en todos los casos se suscribió la terminación del contrato por mutuo acuerdo, estos pagos especiales por liberalidad de la empresa, que la Contraloría General de Medellín definió como "donaciones", suman en total más de 2.500 millones de pesos.

La Personería adelanta varios procesos por estos hechos contra el Expresidente de Une, el Gerente de Gestión Humana, el vicepresidente de Finanzas y Administración, Christian Toro Ludeke y otros funcionarios.

Entre las investigaciones hay una por "presuntas irregularidades en el proceso de terminación del vínculo laboral de los señores Jorge Iván Contreras Cardeño, María Claudia Caicedo Pachóny Juliana Henao Ovalle, el 30 de agosto de 2010, puesto que dentro del monto cancelado por liquidación, se les entregó por concepto de bonificación una cuantiosa suma de dinero, sobre la cual la propia entidad cubrió el ciento por ciento del valor de la retención en la Fuente".

Sobre los mismos hechos, un informe de la Contraloría General de Medellín señala que "se determina un presunto detrimento económico patrimonial (...) por el pago realizado a los exfuncionarios María Claudia Caicedo Pachón, por $519.418.072, Juliana Henao Ovalle por $145.602.857 y Jorge Iván Contreras Cardeño por $307.460.641".

Además de estos tres pagos que se hicieron en el momento en que los citados funcionarios dejaron la empresa, el expresidente, Horacio Vélez De Bedout, luego de un fallo judicial que así lo ordenó, suministró al concejal Bernardo Alejandro Guerra los nombres de los 11 funcionarios a los cuales se les pagaron bonificaciones de este tipo.

Sobre este punto, el Gerente de Gestión Humana y el propio presidente actual de Une, Marc Eichmann , dijeron lo siguiente:

"El utilizar el término indemnización sería como decir que el mutuo acuerdo no es cierto, pero el pago responde a los valores que en un momento dado serían la indemnización", afirmó Ossa.

"Aquí lo que importa es que hay un acuerdo entre dos partes y que hay, de alguna manera, una plata que se da para que la persona se retire, de acuerdo con lo que está estipulado dentro del régimen de contratación que tenemos acá", agregó Eichmann.

¿Incentivos para irse?
Un administrador de empresas consultado sobre la entrega de bonificaciones u otros incentivos, quien prefirió mantener su nombre en reserva, consideró que "cuando un empleado es despedido con justa causa, no debe ser indemnizado ni bonificado. Cuando el despido es sin justa causa, debe ser indemnizado; pero si el retiro es voluntario, solo hay que desearle buena suerte a los funcionarios que deciden irse para cumplir con nuevos retos profesionales".

En todo caso, señaló que los incentivos se conceden para que los empleados que tienen aportes valiosos continúen en la empresa.

De estos tres funcionarios, uno se fue a trabajar con la ETB, competidora de Une.

Las utilidades
El pasado 6 de marzo un comunicado de Une, publicado a través de la Superfinanciera, reveló pérdidas en 2011 por 34.220 millones de pesos, descartando repartición de dividendos. En ese momento la compañía informó que el tema será debatido en la asamblea del 29 de marzo.

Como antecedente a los números rojos, la Contraloría de Medellín en la revisión que hizo en 2011 sobre las cuentas presentadas por la entidad, advirtió el aumento que para 2010 representaban los gastos, el cual no correspondía con las utilidades.

La Contraloría observó, en el fenecimiento de cuenta, "pagos irregulares en bonificaciones y retención en la fuente por transacciones, plan de retiro voluntario y reducción de cargos suscritos con funcionarios y trabajadores por 1.955'666.630 pesos".
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