La senadora Piedad Córdoba, en diálogo exclusivo con EL COLOMBIANO, confirmó que entre los seis secuestrados que serán liberados próximamente por las Farc no se encuentran el cabo del Ejército Pablo Emilio Moncayo ni el coronel (recién ascendido a general) Luis Herlindo Mendieta.
La parlamentaria, autorizada por el Gobierno Nacional para formar parte de la comisión que recibirá a los cautivos, agregó que en esta lista tampoco se encuentra Juan Fernando Galicia Uribe, agente del Gaula de la Policía secuestrado en Paujil, y el único antioqueño que hace parte del grupo de canjeables en poder de ese grupo ilegal armado.
Según la senadora, para la liberación, esta guerrilla seleccionó a los dos últimos civiles canjeables que aún tiene: el ex gobernador del Meta Alan Jara y el ex diputado del Valle Sigifredo López.
Asimismo, a tres miembros de la Policía y a uno del Ejército de los que poco se habla y que son casi unos desconocidos para la opinión pública.
"Tengo claramente dónde fueron cogidos y de qué hacen parte. El parámetro es que casi nadie habla de ellos, nadie pregunta por ellos", confirmó Piedad.
También reveló que con las Farc aún no se ha conversado puntualmente sobre el tema de entregarles a las respectivas familias los restos del capitán Julio Ernesto Guevara y del intendente Luis Hernando Peña Bonilla, quienes perdieron la vida durante el cautiverio.
La congresista no tiene ninguna duda sobre el éxito de este operativo de liberación, en el que sólo está pendiente el visto bueno del presidente Álvaro Uribe para la participación de un garante internacional.
Por eso, señaló que esta liberación es "mostrar voluntad de que realmente sí se quiere llegar no sólo al intercambio sino a lo que va a seguir, que es muy importante", en referencia a un diálogo político que, según dijo, pronto tendrán que entablar el Gobierno y las Farc.
Amenazas a su equipo
Piedad Córdoba también le contó a este diario que ella y algunos miembros de Colombianos por la Paz han recibido amenazas muy graves contra su integridad personal.
Se refirió, por ejemplo, al intento de secuestro contra el profesor Alberto Cienfuegos, catedrático de las universidades Javeriana y de los Andes, y miembro del Polo Democrático.
El miércoles pasado, el mismo día de la reunión entre Piedad Córdoba y el Comisionado para la Paz, "lo abordaron saliendo del edificio un tipo que le pidió la cédula y se identificó como el 'teniente Rodríguez'. Lo fueron cercando con tan buena suerte que lo llamó un estudiante y él empezó a dar las placas del carro. Entonces, los tipos se asustaron. Sin embargo, uno de ellos abrió la parte de atrás del carro y trató de agarrarlo. El carro tenía placas distintas adelante y atrás. Más claro no canta un gallo", contó la senadora.
Según ella, en varias ocasiones les han enviado sufragios a sus colaboradores y "a mí ya me han mandado otros tres viajes muy fuertes. El último fue hace cuatro meses en Bogotá", dijo.
La senadora recalcó que sus condiciones de seguridad han empeorado y que ha tenido que tomar decisiones cada vez más drásticas frente a sus rutinas domésticas.
"Yo por ejemplo no puedo ir a ninguna parte, yo no puedo ir a cine. Van y me sacan de cine, o que me puedo ir a un sitio a bailar, no puedo. Me da trabajo entrar a un centro comercial. Y la familia igual", sostuvo.
Incluso advirtió que tiene sus reservas a la hora de viajar a Medellín: "Yo le tengo mucho miedo a Medellín, esto está otra vez muy difícil. Esto está otra vez en guerra".