Cerca de 100 millones de pesos deberán pagar dos reconocidas discotecas de Cartagena para indemnizar a dos jóvenes a las que les negaron el acceso por el hecho de ser "negras".
La orden fue impartida por el Juzgado Octavo Civil Municipal de Cartagena al resolver una demanda instaurada por Johana Acosta Romero y su hermana Lena, quienes entablaron un proceso de "incidente de liquidación", luego de haber ganado una acción de tutela en 2005.
Las jóvenes reclamaron del Estado la protección al derecho a la igualdad y el principio de no discriminación racial, quebrantado por las discotecas La Carbonera y Q-kayito.
Por haber ganado esta acción judicial, las hermanas Acosta Romero dicen que están recibiendo llamadas en las cuales las amenazan de muerte.
Su abogado, Francisco Hernández, quien se encontraba en Bogotá, también fue presionado y anunció que denunciará la situación ante la Fiscalía.
Johana -quien es estudiante de Derecho-, señaló que el jueves recibió una llamada en la que además de insultarla le decían que no les iba a "alcanzar la vida para ver esa plata". Por eso buscó el apoyo de la Red de Avance de Comunidades Afrodescendientes.
El presidente de esta agremiación, Sindis Meza Pineda, señaló que la red hará públicas las denuncias para que la comunidad conozca esta situación y entienda el riesgo que están afrontando las hermanas Acosta Romero.
Fue un incidente incómodo
Yaro Pitro, propietario de La Carbonera, indicó que él y sus empleados también han recibido amenazas en el mismo sentido.
La situación llegó a un punto en el que algunos de sus trabajadores fueron apedreados en la calle porque llevaban la camiseta de la discoteca.
Pitro aseguró que se trata de un caso muy incómodo por tratarse de "temas muy susceptibles que, de no haber sido tan ampliamente difundidos en los medios de comunicación, quizás el resultado del juzgado habría sido distinto".
Por eso señala que el pago de 49´690.000 pesos es un descuadre para cualquiera, pero que si así se determinó consultará los términos con su abogado.
"Tuto" Mojana, propietario de la discoteca Q-kayito, deberá pagar una suma similar. Sin embargo, no fue posible conocer su opinión.
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