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De la mano de Corantioquia, un total de 84 iniciativas ambientales que están en marcha recibirán un impulso para ejecutarse y llegar a feliz término en los próximos meses.
A la convocatoria se presentaron 255 de los 80 municipios de la jurisdicción de la corporación ambiental, todas enfocadas en la educación y la protección de las riquezas naturales de los territorios y a la recuperación y la conservación de la memoria histórica en zonas que han sufrido el conflicto.
Tienen en común que son propuestas lideradas por la comunidad desde sus juntas de acción comunal, las mesas ambientales, los cabildos indígenas, los colectivos ambientales y grupos afrodescendientes, con un enfoque en la educación para el cuidado del patrimonio ambiental.
En una primera fase, Corantioquia aportará $2’500.000 a cada uno de los proyectos ganadores, los cuales servirán para su financiación e impulso en los territorios.
“La realidad es que la mayoría están en marcha, se vienen ejecutando desde hace tiempo y con el aporte de Corantioquia reciben un impulso para poder continuar”, aclaró el director de la corporación, Alejandro González.
Además de los recursos aportados, Corantioquia asume el compromiso de acompañar, de manera técnica y administrativa, a los seleccionados, con lo cual cumple sus objetivos de lograr un impacto positivo en el cuidado ambiental en cada una de las regiones donde hace presencia.
Región de Cartama: en esta zona, en el Suroeste de Antioquia, se escogieron 9 iniciativas de los municipios de Santa Bárbara, Tarso, Montebello, Fredonia, Caramanta, Valparaíso y Támesis.
De Citará, también en el Suroeste, se beneficiaron 7 proyectos de Jardín, Hispania, Betania, Betulia, Ciudad Bolívar y Andes.
De Hévexicos, en la subregión Occidente, las premiadas fueron 10 iniciativas de las localidades de Liborina, Olaya, Ebéjico, Caicedo, Anzá, Santa Fe de Antioquia, Buriticá, Sabanalarga y Sopetrán.
De Panzenú se escogieron para apoyar 7 proyectos ambientales educativos de las localidades de El Bagre, Nechí, Zaragoza, Cáceres y Caucasia, en la región Bajo Cauca.
De la Oficina Territorial Tahamíes, en la subregión Norte del departamento, se les dará impulso a 22 iniciativas de Santa Rosa de Osos, Yarumal, Campamento, Ituango, Anorí, Donmatías, Gómez Plata, Angostura, Belmira, Guadalupe, San José de la Montaña, San Pedro de los Milagros, San Andrés de Cuerquia, Toledo, Entrerríos, Carolina del Príncipe y Briceño.
De las territoriales Aburrá Norte y Aburrá Sur se apoyarán 19 proyectos de los municipios de Bello, Barbosa, Medellín Girardota, La Estrella, Amagá, Angelópolis, Titiribí, Caldas, Armenia, Heliconia, Itagüí, Envigado y Sabaneta.
Y de la regional Zenufaná (Nordeste y Magdalena Medio) se impulsarán diez iniciativas en Puerto Nare, Puerto Berrío, Cisneros, Maceo, Yondó, Caracolí, Yolombó y Remedios.
De las regiones que no se incluyen proyectos -como el Oriente y Urabá- es porque pertenecen a las corporaciones Cornare y Corpourabá.
Fredy Alonso Tascón, uno de sus gestores, explica que la de su comunidad es una propuesta integradora que se ejecuta en un territorio de 1.300 hectáreas.
Allí, además de trabajar el componente de conservación, se promueve la alimentación sostenible como una riqueza que puede contribuir a la paz de los territorios.
“Para ello, las personas que habitan los territorios tienen que tener su propia alimentación según sus características particulares. Por ejemplo, en Andes está la especie del ojo de anteojos, hay venados, entonces, desde la guardia indígena de Cristianía, vamos a promover la conservación, pero también la agricultura limpia”, explicó Tascón.
En la ejecución del proyecto participan 450 estudiantes de la institución educativa de la comunidad, personal de la emisora comunitaria Chamí Estéreo, productores de café y mujeres, como preservadores de las experiencias culturales, un elemento fundamental en una comunidad que busca no dejarse absorber totalmente por la cultura dominante.
“Es nuestra cosmogonía, porque el territorio es la madre y padre de la creación. Vamos a hacer armonización, que la especie en vía de extinción se sostenga y la tierra sea abundante y fructífera para el bienestar”, argumenta el líder de esta comunidad indígena embera chamí, ubicada en el territorio del Suroeste.
Corantioquia, según anunció su director, tiene proyectada una segunda convocatoria para premiar otras iniciativas este año, enfocadas a la protección de ecosistemas estratégicos y adaptación al cambio climático para integrar la red de conocimiento y cuidado del agua, los Planes de Ordenación y Manejo Ambiental de Cuenca Hidrográfica Abastecedora (Pomca) e iniciativas específicas de comunidades indígenas y afro.