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Cinco fallas detectadas en el audio entre el piloto y la torre de control

30 de noviembre de 2016
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Un audio de 11 minutos y 20 segundos conocido este miércoles reveló la conversación que la controladora aérea del aeropuerto José María Córdova de Rionegro tuvo con el capitán Miguel Quiroga, piloto a bordo del siniestrado vuelo de la aerolínea Lamia, que transportaba a 77 personas de la delegación del club brasileño Chapecoense.

Si no le reproduce el audio, haga clic aquí para escucharlo

El mayor (R) Julio Palacios, piloto retirado de la Fuerza Aérea que además trabajó en la investigación de accidentes aeronáuticos, aseguró que el audio es “revelador” y da detalles que ayudarán en las indagaciones que adelantan la Aerocivil y sus entidades homólogas en Brasil y Bolivia.

“El audio reafirma una hipótesis que se tenía y es que el avión se quedó sin combustible, se apagaron los motores y como consecuencia hubo una falla eléctrica total”, dijo el mayor Palacios.

Lee: El avión que nunca debió haber salido de Bolivia

El piloto retirado estableció, a partir de la grabación, cuatro claves para entender lo que sucedió esa noche en el Oriente de Antioquia.

1. No hubo declaración de emergencia

El mayor (R) Palacios aseguró que cuando un avión afronta una emergencia, tiene que dar a la torre de control una clave específica, estandarizada por las autoridades aeronáuticas internacionales: “El piloto debía decir: ‘Mayday, mayday, mayday’ (tres veces) y luego la matrícula del avión que en este caso era Lima May India 2933. Con eso ya la torre no hubiera tenido que preguntar nada más, porque se entiende que la situación es de urgencia”.

Pero eso no ocurrió. En los 11 minutos de grabación, el piloto asegura tres veces que requiere prioridad en el aterrizaje, pero nunca pronuncia las palabras que activan el protocolo de emergencias.

Eso cambió la situación. “Cuando se habla de prioridad en el aterrizaje, las normas dicen que se atienden en orden de llegada, porque no hay ninguna emergencia. En este caso, reportó primero la emergencia el vuelo de VivaColombia y por eso aterrizó antes. Si el piloto declara la emergencia, inmediatamente la controladora hubiera despejado el área -es decir, habría desviado los otros cuatro vuelos que estaban en la zona, incluyendo al de VivaColombia- y habría permitido el aterrizaje inmediato”, dijo Palacios.

2. Combustible no era suficiente

El Mayor (R) Palacios contó que durante su ejercicio como piloto recorrió varias veces la ruta entre Santa Cruz de la Sierra y Rionegro, la misma que cubrió el avión de Lamia. Con base en esa experiencia, conceptuó:

“Se trata de una ruta de 1.600 millas. El avión en el que viajaban (RJ-85 de matrícula CP2933) tiene una autonomía de vuelo cercana a esas 1.600 millas. Sin embargo, por regulación aeronáutica, cuando un vuelo llega a su destino debe tener combustible suficiente para unos 40 minutos adicionales de vuelo que le permitan llegar al aeropuerto alterno más cercano, porque nunca se sabe si la pista tenga problemas y el avión pueda ser desviado”, dijo.

Así las cosas, y según el experto, para cumplir con la norma internacional de reserva de combustible era absolutamente necesario que el vuelo realizara una escala en Leticia o Bogotá para abastecerse de combustible.

Palacios explicó que esa norma es de verificación interna; es decir, que para despegar las autoridades no verifican cuánto combustible lleva cada aeronave. El responsable de que se cumpla ese estándar internacional es el Jefe de Operaciones de la línea aérea.

3. Temor en el piloto

A Palacios le llamó la atención el tono en el que el piloto se comunicó con la torre de control, pues además de no notificar el mayday, no cumple con todas las instrucciones que le da la controladora, tal vez por nerviosismo.

“Pienso, de lo que escucho en ese audio, que tal vez tiene temor de declarar la emergencia por lo que puede ocurrir (...) Me sorprende que estaba muy tranquilo y solo al final se le siente un afán de aterrizar”, indicó.

Cuando el piloto pide vectores, explica Palacios, es porque no puede ya cumplir con los procedimientos para aproximarse a la pista, según lo que indica la carta de navegación.

Según el experto, cuando un avión reporta emergencia y aterriza, las autoridades de aviación de ese país inmediatamente inician una investigación para determinar qué pasó y, en caso de detectar violaciones a las normas -como la de la reserva de combustible- es probable que haya sanciones que van desde la suspensión de la licencia del piloto, hasta multas económicas y restricciones de operación a la empresa en el país.

4. Falla eléctrica total

Según el reporte del piloto en el audio, el avión entró en falla eléctrica total. Palacios explica que en un avión la electricidad se produce con generadores en los motores. Al apagarse los motores, por falta de combustible, falla el suministro y, como consecuencia, el piloto deja de contar con los sistemas de navegación que normalmente usa.

En ese caso, entonces, se ve forzado a volar con la cabina a oscuras -solo hay una luz de emergencias- y con instrumentos. “En un aeropuerto como el de Rionegro, por su ubicación y altitud, y con un clima como el del lunes -había lluvia y baja visibilidad-, pilotear un avión con instrumentos es muy difícil”. Dijo.

El mayor (R) dijo que, según lo que se escucha en los audios, la controladora actuó según los procedimientos. “Al principio ella le dice que tomará unos 7 minutos darle aterrizaje, y eso fue lo que le tomó (...) si ese día no hubiera habido cuatro vuelos en espera, es posible que el avión hubiera aterrizado justo, con reserva de 7 minutos de gasolina”, sentenció.

5. La investigación

Debido a la relevancia del accidente, por la cantidad de víctimas, Palacios dijo que la investigación podría tomar máximo dos meses.

Ya tienen el audio, hay sobrevivientes y el avión no se incendió -probablemente por la falta de combustible. Eso ayuda a todo el proceso. Además, ya se rescataron las dos cajas negras: una que es la que recopila la información del software del avión llamada Flight Data Recorder (FRD) que dirá cuánto combustible había y qué pasó en el motor; y otra que graba el ambiente y las voces en cabina, llamada Cockpit Voice Recorder (CVR)”, agregó.

Según Palacios, lo que podría demorar la investigación es la intervención de varios países pues tanto Brasil (de donde eran los pasajeros) como Bolivia (de donde partió el avión), podrían tomar parte en la investigación.

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