Cumplidas 100 horas de la evacuación del edificio Bernavento, el silencio reina en la Loma de Los Bernal. Un puesto de mando sigue operando a escasos 200 metros del edificio mientras las construcciones vecinas (unidad residencial Bernalejas y Hogar Geriátrico Hábitat) continúan desalojados.
Lo único extraordinario fue el sonido de las sirenas que causó revuelo en la mañana del domingo. El Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres, Dagrd, explicó que se trató de hombres que llegaron a acompañar a los ingenieros de la Universidad de Los Andes que están revisando las condiciones actuales de la estructura.
El concepto técnico que entreguen los ingenieros será crucial a la hora de decidir qué futuro tendrá la torre de 48 apartamentos.
El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, explicó que el riesgo en la zona sigue latente. “Una columna falló, hubo daño estructural y ahí fue cuando se decidió evacuar a los lugares cercanos que podrían resultar afectados en caso de colapso”, dijo.
Aclaró que aún no hay una decisión definitiva, pero dejó ver que hasta ahora la opción más viable es la demolición del edificio. “Hay unos conceptos que dicen que es inviable continuar con la repotenciación y que la solución real para este problema sería la implosión controlada, para evitar riesgos de personas y de las infraestructuras vecinas”.
María del Pilar Duque, docente e investigadora de estructuras de la Universidad EIA, confirmó que sólo con un estudio se podrá saber si el edificio está en condiciones de resistir. La docente declinó dar un concepto sobre el caso, pues dijo que la única información disponible hasta ahora ha sido la que publicó EL COLOMBIANO en su edición del sábado.
“Lo que sí es cierto es que si en un edificio falla la fundación, falla todo (...) Se puede hablar de repotenciar las fundaciones según el daño que tengan, pero hay que ver los costos y las debilidades del edificio para dar un concepto definitivo”, agregó.