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Inferior con Los Balsos: horrores en una obra que va en $18.000 millones
Esta obra comenzó en $9.832 millones y, para estrenarla, hay que repotenciarla primero.
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Zona de discontinuidad del reforzamiento de la pantalla oriental del deprimido de la Inferior con Los Balsos. -
Acero principal roto, según lo reveló la Universidad de Medellín en su informe del 24 de junio de 2016. -
Zonas con flujo de agua constante en uno de los muros o pantallas del deprimido. fotos estudio u. de medellín
22 de septiembre de 2016
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En el intercambio vial de la Inferior con Los Balsos, en el Poblado, el erario público tiene comprometidos del orden de 18.000 millones de pesos. Aunque la mayor parte de ese dinero ya se pagó a los contratistas, la comunidad, que aportó fondos a través del sistema de valorización, lleva más de un año sin poder disfrutar la obra, por cuenta de una serie de presuntos errores que se cometieron en su planeación, construcción y seguimiento.
La realización de esta obra fue contratada por la administración local de Aníbal Gaviria Correa (2012-2015). Su fecha de inicio oficial fue el 17 de marzo de 2014 y el compromiso del contratista era entregarla el 17 de septiembre de 2015.
Con el presupuesto de 9.832 millones 540.885 pesos, el ganador de esta obra pública, o sea la Unión Temporal (UT) Cruce Balsos, debía construir el paso a desnivel en el cruce de la transversal Inferior con la Loma de Los Balsos, incluyendo un cruce semafórico en la vía Linares con la Loma de Los González. Los diseños los elaboró EDL S.A.S. Ingenieros. Y la interventoría, que va en 1.598 millones, quedó bajo la responsabilidad del Consorcio Soluciones Medellín.
A menos de un mes para que se venciera el plazo para entregar los trabajos, la UT Cruce Balsos -en la que la persona natural Bernardo Ancízar Ossa López tiene un 75 por ciento- le cedió el contrato a Gisaico, previa autorización del entonces secretario de Infraestructura Física de Medellín, Javier Darío Toro Zuluaga.
En el documento de cesión quedó consagrado que el Municipio de Medellín “no libera al cedente (la UT) del cumplimiento de las obligaciones contractuales y particularmente de las ejecutadas con anterioridad a la presente autorización”. Y se añade que el cesionario, o sea Gisaico, “es responsable del cumplimiento del contrato cedido a partir de la fecha y, por lo tanto, no es responsable de incumplimientos causados con anterioridad a la presente autorización”.
Datos oficiales obtenidos por este diario, indican que el presupuesto oficial de 9.832 millones de pesos ya fue desbordado, y por mucho.
En efecto, sin incluir los diseños y la interventoría de los mismos, el valor contractual de la Inferior con Los Balsos va en 14.832 millones 540.885 pesos. A tal suma se le deben agregar los 1.157 millones de pesos de la interventoría de la construcción y los 218 millones que, según fuentes oficiales, costó el trabajo de la Universidad de Medellín.
El taxímetro sigue corriendo. De manera preliminar, la administración de Federico Gutiérrez Zuluaga ha destinado un presupuesto de 2.200 millones de pesos para hacer estudios que complementen los hallazgos sobre la mala calidad de las obras de la Inferior con Los Balsos, y para hacer las reparaciones de rigor.
De ahí el monto de 18.000 millones de pesos para una obra cuya calidad es cuestionada y que en parte se evidencia con las imágenes consignadas por los expertos de la Medellín en su informe del 24 de junio de 2016, y cuya publicación le fue autorizada a este medio por la Alcaldía.
De acuerdo con el concepto emitido por los expertos de la Medellín, una deficiencia grave se presentó en los análisis del suelo.
En lo que se denomina “marco geológico y geotécnico”, se afirma que las condiciones geológicas de la zona son complejas, pues se identifican depósitos naturales en los que predominan suelos transportados por gravedad y predominan dos tipos, flujo de lodos y de escombros. A lo anterior se añade la presencia de aguas subterráneas, cuyo comportamiento no se analizó, como lo resalta el estudio.
En concepto de los especialistas, los muros o pantallas en la zona bajo el puente se presentan en una condición de vulnerabilidad alta, debido a que no fueron consideradas las condiciones sísmicas en el diseño estructural de ellas ni del puente mismo que les sirve de restricción.
Entre otras deficiencias señalaron que los informes finales y las memorias de cálculo están incompletos y no tenían las características esperadas para un proyecto en la práctica normal de la ingeniería.
Fuentes de la Alcaldía le indicaron a EL COLOMBIANO que otro de los problemas es que los diseños de la Inferior con Los Balsos se hicieron en el 2008 y no fueron actualizados, con miras a la contratación de la construcción en el 2014. La historia continuará, porque hay presuntas irregularidades en los seguros .
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