Tras diez días de preparativos en la zona por parte del personal de la Fiscalía y la Alcaldía de Medellín, hoy empieza en firme la excavación de tierra en La Escombrera de la comuna 13, donde se considera que hay un número indeterminado de cadáveres de personas víctimas de desaparición forzada por parte de los grupos armados y algunos agentes estatales que hicieron presencia en la zona a finales del siglo pasado y principios del presente.
Aunque el exparamilitar Juan Carlos Villada, alias “Móvil 8”, del Bloque Cacique Nutibara, confesó que en el lugar su grupo enterró cerca de 50 cadáveres, las víctimas hablan de que pueden ser 80, 90 o más de cien los cuerpos sepultados. Su jefe, Diego Murillo Bejarano, alias “Berna”, confesó que serían 300.
La exploración inicia en el Polígono Uno sector La Arenera, en un periodo que inicialmente se calculó en cinco meses y ahora se habla de que podrían ser tres, según el consejero para la Reconciliación y la Paz de la Alcaldía, Jorge Mejía Martínez.
A diez metros de la primera zona de excavación, una retroexcavadora Link Belt 130, de color rojo, volqueta al lado, espera ser encendida para entrar a raspar la tierra, procedimiento que se hará con delicadeza para que, en el hundimiento del hierro, no se destruyan posibles piezas óseas.
“La máquina va a raspar arañando la superficie de la tierra, no hundiéndose sobre ella”, explicó el antropólogo forense del CTI, John Fredy Ramírez, lo cual, según el funcionario, dará garantías de que no se destruirán evidencias.