A la medianoche del jueves 20 de abril, una familia del corregimiento de San Antonio de Prado, al occidente de Medellín, fue víctima de tres crímenes atroces: asesinaron al padre, abusaron sexualmente de la hija, prendieron fuego a la casa y huyeron antes de las 12:50 de la madrugada del viernes.
A esa hora llegaron los bomberos a atender el incendio, quienes encontraron a la mujer, de 33 años de edad, con heridas de arma blanca y signos de violación, y la trasladaron a un centro asistencial cercano.
Lea aquí: Asesinado en Medellín narco pedido en extradición
Después, la policía y los vecinos del sector entraron a la casa a buscar más personas heridas, pero lo que encontraron fue el cuerpo sin vida de Manuel Antonio Gutiérrez Céspedes, de 77 años.
Gutiérrez tenía dos heridas abiertas en el cuello y el mentón, aparentemente causadas por un arma cortopunzante.
Según los familiares de Gutiérrez, el hombre era dueño de tres propiedades y el único problema que le conocían era una deuda que tenían con él por un terreno ubicado en la parte trasera de la casa que los criminales incendiaron.
Otra mujer asesinada en Medellín
Horas antes, a las 6:55 p.m. del jueves, la policía recibió un llamado de alerta de la comunidad de La Cruz, en la Comuna 3: una mujer inconsciente, desconocida por todos los vecinos, estaba tirada sobre las escaleras de la parte alta del barrio.
Cuando la policía llegó, la mujer ya no tenía signos vitales. Tenía aproximadamente 45 años de edad, piel trigueña, contextura delgada, cabello largo y ondulado, estatura mediana y una herida en el cuello, de aproximadamente de 20 centímetros, que le llegaba hasta la tráquea.
“Según residentes del barrio, la víctima no era conocida en el sector y en ningún momento se escucharon gritos o alegatos. Los móviles y sindicados son investigados por las autoridades. Al lugar de los hechos no se acercaron familiares o amigos que permitieran identificar la víctima”, informó la policía en un comunicado.
