A las 6:28 de la mañana de este miércoles, un sismo de magnitud 4.7, con epicentro en el municipio de Tona, departamento de Santander, se sintió durante unos pocos segundos en la capital antioqueña.
El temblor, que no sacudió con tanta fuerza en Medellín, sí llegó a asustar a los habitantes de Bucaramanga y Cúcuta, y a las ciudades venezolanas de San Cristóbal y Palmira, en el estado de Táchira, cerca a la frontera con Colombia.
Según el Servicio Geológico Colombiano, el sismo ocurrió a solo 14 kilómetros de Bucaramanga, pero tuvo una profundidad de 164 km.
Hasta ahora no se reportan daños materiales.