Cuatro municipios en Norte de Santander incomunicados y en calamidad pública, más la alerta roja que las autoridades emitieron en Cundinamarca son algunos de los estragos que dejan las lluvias de los últimos días en el país. De acuerdo con Colprensa se estima que son cerca de 7.000 damnificados en ocho departamentos.
Norela Arenas, coordinadora Gestión del Riesgo Norte de Santander, explicó que la situación más compleja se vive en los municipios de Chitagá y Cácota, en donde ha sido compleja el envío de las ayudas ya que las vías están bloqueadas por derrumbes.
Explicó que los municipios que han reportado afectación por lluvias son Toledo, Chitagá, Labateca y Cácota. “Tenemos permanente vigilancia en Chitagá. Allá tenemos maquinaria en toda la carretera porque tenemos deslizamientos permanentes. La vía que conduce hacia el municipio está cerrada. Hasta ahora tenemos un dato parcial de cerca de 180 familias que hemos evacuado de manera preventiva. Además, tenemos una afectación en el acueducto que colapso y por eso estamos enviando carrotanques para el suministro de agua potable”.
El alcalde de Toledo, Yorjan Triana, reportó que en su pueblo se contabilizaron cerca de 373 familias afectadas. Entretanto en Cácota se desbordó la quebrada Santa Teresa y afectó un tramo de vía que conduce al sector de Hato de la Virgen, provocó el desalojo de 3 familias y la afectación de un tramo del acueducto.