El país parece marchar por dos vías opuestas. Mientras que entre los encuestados por Invamer aumentó el apoyo a los diálogos con las Farc y el inicio del proceso con el Eln, la percepción negativa de la economía pasó del 72 al 78 %.
El 71 % considera que el empleo está empeorando y el 89 % cree que el costo de vida es crítico. Si bien al presidente Juan Manuel Santos aumentó cinco puntos en aceptación, creció en 7 puntos el negativismo general.
Según Martín Orozco, gerente de Invamer, los anteriores contrastes se deben a que el Gobierno se ha focalizado en sacar adelante el proceso, pero a la gente le preocupan múltiples problemas, como la corrupción, el poder adquisitivo y la seguridad.
“La aprobación de Santos mejora, pero aún es muy baja. Pese a los resultados del plebiscito, es bien visto que esté escuchando las preocupaciones de los líderes del No. El Nobel de Paz también le ayudó en algo”, agregó Orozco.
Cristian Rojas, docente de Ciencia Política de La Sabana, afirmó que la percepción pesimista sobre la economía acompañará a Santos hasta el final de su periodo y que crecerá con el avance de la discusión de la reforma tributaria, porque la gente siente que puede estar más afectada en sus finanzas.