Liberales rebeldes arman un nuevo movimiento

El exministro y exprecandidato presidencial Juan Fernando Cristo lidera la disidencia liberal declarada como opositora del Gobierno de Iván Duque.

ilustración Morphart

Sin importar de si esta semana el Partido Liberal se declara independiente o de Gobierno, como lo pide el nuevo Estatuto de la Oposición, una facción de esa colectividad ya decidió retirarse del partido y conformar un grupo significativo de ciudadanos, con apoyo también de algunos líderes de izquierda.

Lo lanzarán oficialmente el próximo mes y le están dando los últimos retoques y afinando los liderazgos y las propuestas que harán. Están en búsqueda de nombre y tienen dos propósitos: hacer oposición al gobierno de Iván Duque y competir en las elecciones regionales de 2019.

No se sienten representados por el expresidente César Gaviria y consideran que desde adentro no tienen campo de acción para tomar el control de la colectividad, además, porque si bien en la bancada del Congreso hay voces disidentes, la mayoría rehúye a hacer oposición y se sienten más de centro derecha.

Este grupo de liberales no estuvo de acuerdo con la decisión de la oficialidad de acompañar en segunda vuelta al entonces candidato Iván Duque, por considerar que era un triunfo ajeno y que sus tesis riñen con las del partido.

Estuvieron con Humberto de la Calle hasta el final y en segunda vuelta se inclinaron hacia Gustavo Petro y, por eso, no descartan que para 2019 lleguen a acuerdos con partidos y movimientos de izquierda, para viabilizar candidaturas regionales. Serán un movimiento de centro izquierda.

¿Quiénes son?

La cabeza visible de este movimiento es Juan Fernando Cristo, el exministro del Interior de Juan Manuel Santos, escoltado por dos de sus exviceministros: Luis Ernesto Gómez y Daniel Quintero, quienes están construyendo procesos locales en Bogotá y Medellín.

También estaría como refuerzo el exrepresentante a la Cámara y exministro Guillermo Rivera, quien al final no fue nombrado embajador. Y por los lados tienen el apoyo de varios grupos de juventudes liberales, que formalmente no pueden acompañarlo, porque hacen parte de la institucionalidad del Partido.

Los veteranos también tendrán su espacio en esta nueva aventura, como la exministra y exsenadora liberal Cecilia López, el exministro Luis Eduardo Garzón y la excandidata vicepresidencial Clara López, entre otros dirigentes de centro - izquierda e izquierda.

Cristo le dijo a EL COLOMBIANO que, por lo menos, la mitad de la bancada apoya de corazón esta iniciativa, como el senador Luis Fernando Velasco, pero que por ahora sus miembros no pueden hacer parte de la misma porque le deben lealtad al partido por el que salieron elegidos.

“Defenderemos a las víctimas. Aunque parece que no harán trizas el Acuerdo, pero hay que estar preparados. Seremos oposición, pero diferente a la radical de Petro. Impulsaremos la reforma agraria integral y buscaremos convergencia con sectores sociales”, dice el exministro.

Sobre la situación del Partido Liberal manifestó que quedará mal si se declara independiente o de Gobierno: “No hay un acuerdo programático con el presidente Duque sino una intención de quedarse con algunos puestos. Hay que esperar que pasa con el Pacto por Colombia. Gaviria liquidó la colectividad y no sale a las regiones porque encontraría una rebelión. El Partido no le está diciendo nada al país y por eso preferimos ser liberales rebeldes”.

Las fisuras irreconciliables

Este nuevo cisma en las huestes rojas acaba de atomizar el Partido, pues ya un sector, liderado por el exsenador liberal Juan Manuel Galán, está agotando la vía jurídica para revivir la personería del Nuevo Liberalismo, la disidencia que fundó Luis Carlos Galán a principios de los 80.

Y en la contienda pasada la exsenadora liberal Sofía Gaviria también se declaró en rebeldía y acompañó desde el inicio al Duque. Lo propio hizo la exsenadora Viviane Morales, que también se arrastró a los cristianos del partido.

Angélica Bernal, directora del Departamento de Ciencia Política de la U. Jorge Tadeo Lozano, recordó que las divisiones internas del P. Liberal han sido parte de su historia. “Las luchas intestinas nunca han cesado y lo que pasa ahora es que esas diferencias no pudieron superarse en la última contienda electoral”.

Para Carlos Arias, docente de Comunicación Política de la U. Externado, se trata del faccionalismo histórico de los partidos tradicionales, como ocurrió en los 60 con el Movimiento Revolucionario Liberal (MRL), fundado por el después presidente de Colombia, Alfonso López Miquelsen.

“Lo que está haciendo Cristo no es nuevo. Está buscando un espacio que no le permite la dirección liberal actual. Es improbable que tenga éxito en el futuro como proyecto autónomo. Va a crecer, pero buscará alianzas con otros sectores”.

Mientras hacen su epifanía, los rebeldes, como se autodenominan, están recorriendo el país. Ya sembraron la semilla en Cali, Cartagena, Villavicencio, Valledupar, Medellín y sigue Ibagué. Los resultados del presidente Duque será decisivos para su futuro.

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mil 777 votos obtuvo Juan Fernando Cristo en la consulta presidencial del Partido Liberal en noviembre de 2017.

Congresistas tiene el P. Liberal. Son la bancada más grande en la Cámara, por lo que su peso político es alto.