El Eln llegaría a una mesa de diálogo con sus principales jefes vivos y siete frentes de guerra; todos que lograron sobrevivir a la estrategia militar de la seguridad democrática en 12 años. Debilitados militarmente pero fortalecidos en su ideario político, según Ariel Ávila, investigador de la Fundación Paz y Reconciliación.
Prueba de ello es que “Pablito” —cabeza del Domingo Laín, estructura más fuerte de ese grupo armado— ya es integrante del Comando Central del Eln, Coce, junto con alias “Paula”, que pertenecería a la jefatura de las milicias.
De “Pablito” o Gustavo Aníbal Giraldo Quinchía, se sabe que es el jefe militar del Eln. Fue capturado el 6 de enero de 2008 en Bogotá y estuvo recluido en la cárcel de Cómbita, Boyacá. Sin embargo, en octubre de 2009 fue traslado a Arauca para unas diligencias judiciales. Seis milicianos aprovecharon la poca seguridad en el penal de esa ciudad y facilitaron la fuga de “Pablito”, que está pedido en extradición por los Estados Unidos. Se le acusa de narcotráfico.
El Ejército aseguró en su momento que el jefe guerrillero fue quien más se opuso a los diálogos que adelantó el expresidente Uribe con esa organización. A su vez, también se criticó que “Pablito”, desde un principio, puso palos en la rueda para que se lograra un acercamiento real con los delegados del presidente Santos en Ecuador.
Sin embargo, con su presencia en el quinto congreso nacional del Eln, habrían quedado despejadas las dudas de su oposición a que se inicie una negociación con el Gobierno.