La prevención, tarea pendiente

La vacunación es el primer nivel de prevención que propone la Organización Mundial de la Salud. FOTO Juan Antonio Sánchez

El Colombiano

24 de mayo de 2018

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Por Daniel Rivera Marín

La Organización Mundial de la Salud establece tres niveles de prevención que definen técnicas de atención y criterio para atender a los ciudadanos. En el primero se evita la adquisición de la enfermedad, en el segundo se detecta la enfermedad en instancias primeras, en niveles precoces donde aún se puede impedir la progresión, y en el tercero ya se tratan las enfermedades, el paciente va camino a una rehabilitación y a la ralentización del progreso inocuo.

Alcanzar estos objetivos en un país donde el 26,9 por ciento de las personas viven en pobreza y el 7,4 por ciento están en la pobreza extrema, es difícil.

Para Gabriel Jaime Otálvaro, profesor de la Facultad Nacional de Salud Pública, que uno de los serios problemas que tiene el país es la ausencia de políticas públicas de salud.

“Una de las cosas que no se ha logrado hacer de manera sistemática, coherente, con continuidad, son las políticas a la promoción de la salud y prevención de las enfermedades. Por eso, en los centros hospitalarios de tercer nivel hay camas llenas y mientras tanto los centros de primer nivel están subutilizados”, argumenta.

En Colombia se privilegió la atención de los enfermos y no destina los recursos suficientes para evitar que la gente se enferme, agrega Otálvaro.

“En la segunda parte del siglo XX varios países, sobre todo los escandinavos, demostraron que se pueden tener sistemas fuertes donde el primer nivel es capaz de solucionar 80% de los casos. Es que la gran mayoría de enfermedades, las infecciosas e incluso las crónicas, se pueden trabajar con un enfoque preventivo si el sistema está dirigido a la prevención”, concluye el investigador.