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A toda marcha avanzan las obras de uno de los proyectos más emblemáticos de la actual administración de Medellín, la ciudadela universitaria Pedro Nel Gómez, que ya tiene en funcionamiento dos laboratorios para la experimentación e investigación y realiza los trabajos finales de un edificio para aulas y oficinas.
Con las intervenciones que hasta el momento se realizan, se completa la primera fase del megaproyecto que se espera sea entregado a finales del año entrante, y que unirá las instituciones educativas Pascual Bravo, Colegio Mayor y el Tecnológico Metropolitano (ITM).
En total, las directivas del proyecto, enmarcado dentro de la estrategia municipal Sapiencia, calculan que el avance de obras esté en un 50 por ciento. De hecho, se espera que antes de finalizar el año se haga un recorrido con autoridades nacionales y locales.
Mauricio Morales, rector del Pascual Bravo, afirmó que con lo construido hasta el momento y lo que vendrá después, se generarán más y mejores espacios para uso de las tres instituciones y se aumentará la cobertura.
Añadió que la nueva infraestructura, que comprende el bloque y los laboratorios, tuvo una inversión de 13.000 millones de pesos, y facilitará la entrega a la ciudad más tecnólogos.
“El nuevo desarrollo académico tendrá paneles solares para iluminación, aulas de clases, auditorios y en el último de los siete pisos habrá un moderno centro de estudios”, apuntó Morales.
Un campus soñado
La ciudadela Pedro Nel Gómez está comprendida por un área de 1.274 metros cuadrados para el edificio de servicios del Colegio Mayor y la plazoleta de acceso; 2.300 metros cuadrados de zonas verdes y 506 metros cuadrados para el nuevo edificio de servicios del Pascual Bravo.
Como parte del equipamiento también está la Fuente de las Américas Unidas, obra donada por el Maestro Pedro Nel Gómez.
Así mismo, Sergio Roldán, director de la Agencia de Educación Superior de Medellín, Sapiencia, reportó, al presentar los diseños de la obra, que los corredores arquitectónicos de la Ciudadela contemplan delimitaciones de los sitios donde se iniciará la construcción de los edificios de bordes y la articulación del paseo urbano en la acera desde el Colegio Mayor hasta el Pascual Bravo.
“Un estudiante de tecnología del Instituto Tecnológico Metropolitano, ITM, puede graduarse de ingeniero en el Pascual Bravo. Ya existe la integración en procesos académicos, de investigación y bienestar, entre otros”, anotó.
La obra completa, que se financia con recursos del fondo Medellín Ciudad para la Vida, creado por la fusión Une - Millicom, beneficiará 36.000 estudiantes.
Además, contempla la construcción de un edificio de tres pisos en el Colegio Mayor para comunicar las instituciones con el paseo urbano entre las calles 65 y 73 .