El único camino que tiene Atlético Nacional para avanzar a la siguiente ronda de la Copa Libertadores es vencer a Botafogo en Brasil y a Barcelona en Medellín (ver gráfico) y esperar que el equipo brasileño no supere a Estudiantes en la última fecha.
La situación es compleja y todos en el plantel son conscientes de ello. Sin embargo, el triunfo 4-1 sobre Estudiantes de Argentina dejó un buen sabor en el vigente campeón por varias razones: Nacional abandonó el sótano del grupo, atrás quedó la racha de 8 partidos internacionales sin ganar y, en especial, recuperó su buen fútbol.
El técnico Reinaldo Rueda destacó que “se mejoró en lo colectivo y se arriesgó en lo individual”. Añadió que recobraron la alegría “y eso es muy importante para lo que viene”. Rematar bien la Libertadores será clave para alcanzar una casilla en la Suramericana, en caso de que falle el primer objetivo. Pero antes, el 10 de mayo, tendrá la opción de buscar el título de la Recopa Suramericana ante Chapecoense.
Rueda compartió ayer con los concejales y alcaldes de los municipios antioqueños.
