Nacional fue ayer lo primero para más de 4.000 hinchas que desde el centro comercial Obelisco salieron en 16 buses, carros particulares y motos hacia la sede deportiva de Guarne con la intención de darle el último aliento a sus ídolos antes del duelo de este miércoles, 7:45 p.m. en el Atanasio Girardot.
La cita era a las 7:30 de la mañana y en el lugar fueron apareciendo jóvenes con la parafernalia del club paisa, también padres de familia, mujeres e hinchas de todas las condiciones sociales, a los que los une un sentimiento, su amor por el verde.
Algunos no asistieron a las clases que tenían en colegios y universidades, otros le pidieron permiso a sus jefes para poder asistir. También hubo quienes, sin consentimiento, allá estuvieron, sin importar las consecuencias.
“Esto no se ve todos los años, a mí no me tocó el título del 89 y en la final del 95 todavía no tenía uso de razón. Es la primera vez que voy a ver a Nacional en una final de la Libertadores y es una emoción que no se puede describir”, indicó Carlos Alzate, de 26 años.
Pitos, cánticos, banderas y un río de personas de camisetas verdes y blancas sorprendieron a los viajeros que transitaban por la autopista Medellín-Bogotá y que debieron esperar pacientemente el trancón vehicular.
Felipe Muñoz, uno de los líderes de la barra Los del Sur, manifestó que esta caravana ya se volvió una costumbre cuando Nacional está en finales: “Ya lo hemos hecho otros años y el equipo fue campeón, así que para esta hinchada ya se convirtió en cábala”.
Cuando llegaron a Guarne, los jugadores y el técnico Reinaldo Rueda suspendieron el entrenamiento para desde el campo de juego saludar a sus seguidores. Incluso, se tomaron varias fotos con el fondo de los hinchas, que pusieron varias pancartas en las que se leía: “siempre presentes la hinchada y los jugadores”.
Uno de los más aclamados fue Álex Mejía, al unísono le cantaron “¡Mejía tiene huevo!, ¡tiene huevo!”, en señal de despedida. El volante jugará ante Independiente del Valle su último partido antes de ir a México.
La práctica de hoy será a puerta cerrada, porque el técnico Rueda definirá la estrategia para poner a Nacional como campeón continental.