Sin esforzarse demasiado y aprovechando al máximo los errores del rival, Atlético Nacional superó esta noche 2-1 al Cúcuta Deportivo que estaba despidiéndose de la Primera A.
Sebastián Támara, uno de los delanteros juveniles que empiezan a proyectar en el club antioqueño, ingresó e hizo realidad el sueño del Pibe, ya que en su estreno con el verde en el profesionalismo lo hizo con el gol que le dio el triunfo a su equipo para que su equipo llegara a 45 puntos y volviera al primer lugar de la reclasificación con 80 unidades.
La escuadra motilona se despidió con honores de la máxima división, porque además de abrir el marcador con Cristian Dájome a los 25 minutos, también tuvo opciones claras en el arco del argentino Franco Armani, quien fue una de las figuras del encuentro por la fecha 20 de la Liga Águila-2.
Sin embargo, el visitante aceleró en el momento preciso y con Jonathan Copete, que había empatado a los 38 minutos, generó la acción del triunfo gracias al oportunismo, porque en una mala devolución de Pablo Escobar estuvo atento para dejarle limpio el balón a Támara para que liquidara el encuentro con el arco a su disposición a los 86 minutos.
Por momento el partido lució lento y todo apuntaba para la paridad en el estadio General Santander, pero con el ingreso de Marlos Moreno y la claridad de Támara, el conjunto montañero consiguió los tres puntos que lo ratifican en el primer lugar y lo dejan a la espera del rival de los cuartos de final, que serán sorteados este domingo en Bogotá.
Mientras el creativo Martín Morel abandonó la cancha impotente luego de reconocer que “hicimos un buen partido pero pagamos caro las falencias”, el juvenil Támara lució pletórico porque hizo su primer gol ante su gente (es nortesantandereano) y le dio gracias a “Dios y al técnico Reinaldo Rueda por me dieron la oportunidad de jugar con fe para que hiciera realidad mi sueño de debutar con gol en el profesionalismo algo que de verdad fue lindo y muy emocionante”.