Reinaldo Rueda, técnico de Atlético Nacional, se mostró disgustado por el tema del cambio de sistema implementado por Conmebol para las competencias continentales de Suramérica. Y es que con la decisión de que la Copa Libertadores y la Suramericana se jueguen de manera anual y simultánea, se obliga a que Nacional solo pueda participar en la primera cita y que, si quiere participar en la segunda, debe quedar eliminado en fase de grupos y ser uno de los diez mejores de los que se queden afuera, aspecto al que no apuntan en las filas verdes.
“Ya sabemos que por ser campeones de la Libertadores tenemos un gran castigo y es no poder participar en la Suramericana”, lamentó el vallecaucano. Además, con esa decisión el destino de la plaza a la Suramericana por ser campeón de la Copa Águila, en la cual jugará el partido de vuelta de la semifinal mañana ante Santa Fe, pasa a ser motivo de evaluación entre las prioridades. “La instrucción para los jugadores siguen siendo las mismas, no cambia la planificación, pero es un irrespeto que se cambien las reglas sobre la marcha... no solamente es Santa Fe, si no lo que se nos viene, hay que ver hasta dónde nos llega la fortaleza psíquica”.
Es que el calendario del campeón de América se aprieta en estos últimos meses del año: Suramericana, Liga, Copa Águila y el anhelado Mundial de Clubes. Y el timonel se ha mostrado triste por la poca ayuda que ha recibido, tanto de Conmebol como de la Dimayor, para poder representar a Colombia en las mejores condiciones. “No podemos aspirar a la Liga porque en ese momento vamos a estar en el Mundial de Clubes y vamos a discutir con la comisión técnica y las directivas a ver a qué le apuntamos”.
Por último, ayer en rueda de prensa manifestó su enojo por el tratamiento que el ente rector del fútbol colombiano le está dando al tema del G8 (equipos grandes que buscan mayor compensación económica por derechos televisivos, del cual hace parte Nacional). Al igual que expresó el técnico del Cali, Mario Alberto Yepes, el director de orquesta de los paisas espera que no haya repercusiones en los arbitrajes por esta problemática. “Tenemos que hacer un alto en el camino y ponernos serios, si vamos a tirarnos esto o si lo vamos a parar y seguir como veníamos, con honestidad, pero si hay dos o tres personas que quieren encochinar esto, ya le corresponde a las autoridades tomar cartas en el asunto”, apuntó.
Y es que las expulsiones en los últimos juegos, y lo que ellos consideran como decisiones arbitrales injustas, han sido aspectos de preocupación para el hombre que planificó la gesta continental de julio, que ahora se muestra molesto por diversas situaciones.
