Hay infraestructura, hotelería, medios de transporte, seguridad, condiciones deportivas y, ante todo, querer de la dirigencia. Y así, Medellín y Antioquia emergen como la llave ideal para organizar los próximos Juegos Nacionales, previstos para 2019.
84 años atrás (1932), Antioquia se atrevió a realizar estas justas cuando apenas se iniciaban y después de que el Valle del Cauca celebrara los primeros Juegos -entre 1928 y 1929-.
En 2012 trató de realizarlos, pero fracasó. Ahora todas las baterías se enfilarán, por parte de Indeportes, apoyado por las administraciones departamental y municipal (Medellín), para lograr el objetivo, entendiendo que se cumple con todos los requisitos, según el gerente de Indeportes, Hernán Darío Elejalde.
Antioquia y Medellín lo tienen todo para hacerlos: los costos serían mínimos, porque la infraestructura está dada en cuanto a escenarios y hotelería que son los dos puntos más importantes a la hora de una calificación.
“La exigencia mayor es en escenarios deportivos y hotelería, en lo cual estamos muy bien. Otros ítems que se califican en la postulación son alimentación y seguridad, y nosotros estamos bien porque acá se han realizado eventos de gran importancia tanto en el campo deportivo, como económico y cultural”, explica el funcionario.
La inversión sería de unos 100 mil millones de pesos y en el caso de adecuaciones de escenarios subiría a unos 250 mil millones, teniendo en cuenta que se tendrá como sede a Medellín y subsedes a municipios del área metropolitana, Oriente cercano (Rionegro, Guarne y Guatapé) y la otra zona sería Urabá.