<img height="1" width="1" style="display:none" src="https://www.facebook.com/tr?id=378526515676058&amp;ev=PageView&amp;noscript=1">
x
language COL arrow_drop_down

Orlando seguirá siendo el Duque de plataformas y acantilados

  • Orlando Duque sigue siendo sinónimo de respeto y admiración gracias al gran talento que sigue desbordando en los saltos de altura. Fue cuarto en esta competencia en 2014. FOTO CORTESÍA RED BULL
    Orlando Duque sigue siendo sinónimo de respeto y admiración gracias al gran talento que sigue desbordando en los saltos de altura. Fue cuarto en esta competencia en 2014. FOTO CORTESÍA RED BULL
  • FOTO CORTESÍA RED BULL
    FOTO CORTESÍA RED BULL
  • FOTO CORTESÍA RED BULL
    FOTO CORTESÍA RED BULL
  • FOTO CORTESÍA RED BULL
    FOTO CORTESÍA RED BULL
26 de abril de 2015
bookmark

Dos años atrás, cuando Orlando Duque tenía 38 años de edad, había insinuado -en entrevista para EL COLOMBIANO- su retiro de las plataformas y los acantilados, a los 40. Hoy, tajantemente, señala que está entero, que el deporte no lo aburre, que sigue disfrutando de él, que su cuerpo aún no le ha anunciado que se debe ir y que, por el contrario, seguirá compitiendo. ¿Hasta cuándo? Eso es lo que ni él ni nadie sabe.

Querido, aplaudido y reconocido como un grande de los clavados de altura y del deporte en general, Orlando, vallecaucano de nacimiento, emprendió ayer en Cartagena una nueva temporada en la Serie Mundial Red Bull de clavados. Y no será la última. Por lo menos lo tiene claro como objetivo. Solo una lesión, enfermedad o en el escenario que su cuerpo se lo advierta, dejaría la competencia.

Orlando se puede dar el lujo de ser un tipo reconocido a nivel mundial; escuchado en lugares tan importantes como la Federación Internacional de Natación -Fina- y el Comité Olímpico Internacional -COI-, entidades que le creen tanto que ya se habla de los clavados de altura para unos futuros Juegos Olímpicos. Hoy vuelve a hablar para este medio.

Después de competir tantos años afuera y tener ahora la posibilidad de hacerlo en casa, ¿qué sabor le deja su presentación en Cartagena?

“Competir en tu casa siempre es algo chévere y yo nunca había tenido la posibilidad de disputar un evento tan importante como la Serie Mundial. No solo la competencia, es el compartir con la gente, porque es rico mostrarse en casa, es realmente emocionante”.

Con la experiencia acumulada ¿cree que es más fácil hacer una mejor presentación de local?

“No. La competencia, en general, da presión sea donde sea, porque no cambia la naturaleza del deporte, es la misma altura, el número de saltos... Lo que sí cambia es el nivel de estrés por la responsabilidad de defender la casa y la presión es mayor al saltar frente de tu gente”.

Sin embargo, brinda la posibilidad de una exigencia mayor y de mostrar de qué está hecho...

“Eso lo da la experiencia de tantos años de trabajo continuo que me permite, por ejemplo, bloquear muchas cosas a la hora de la competencia y concentrarme en el trabajo de hacer las cosas bien”.

En lo previo de Cartagena usted siempre impulsó esa candidatura de Colombia para hacer una competencia de esta envergadura. ¿Cuál fue su mayor aporte al engranaje final?

“Hubo un equipo de trabajo idóneo en el montaje de esta clase de eventos. Cada quien en lo suyo. Son personas especializadas que cumplieron de gran forma. Yo no me veo mucho ahí. Mi sugerencia básica tuvo que ver con el lugar dónde hacer de la competencia un espectáculo maravilloso. Vi el Centro de Convenciones y siempre supe que ahí funcionaría todo bien a pesar de que desconocía la altura y la profundidad del lugar aledaño. El resto quedó en manos de los especialistas de Red Bull, quienes realizaron la investigación previa, lograron los permisos y montaron la plataforma”.

¿Cree que darle una parada a Cartagena, airea, por decirlo así, la Serie Mundial?

“Indudablemente. Creo que sí cambia en algo, porque muchos años, por ejemplo, hemos empezado en temporada fría. Ahora lo hacemos en clima caliente; es bueno, al menos, empezar la temporada en calor. Y algo que es sumamente importante, los clavadistas querían venir a Colombia, ver el país, comprobar todo lo que yo les he comentado del país y cuando se realizó el selectivo en Cali todos querían regresar y los que no estuvieron allí les gustó muchísimo el proyecto. Cartagena es una ciudad espectacular y adecuada para este evento. Por lo tanto sí creo que, de aquí en adelante, le dará un nuevo aire, una nueva cara a la Serie Red Bull”.

En lo personal, ha tenido algunos altibajos en los últimos años, quizás debido a las lesiones, como la de tobillo. ¿Confía que este año las cosas mejoren y el aspecto salud no sea tan determinante en su competencia?

“En el arranque de año, y mirando el componente de la temporada -8 paradas-, me concentré más en mejorar la fuerza, y aunque en los últimos años he tenido algunos problemas físicos, en especial en el pie, que aún no se ha recuperado del todo, mi trabajo está enfocado a mejorar la flexibilidad del tobillo y así poderme mover con un poco más de comodidad, con algo de más soltura”.

Incluso bajando de peso...

“Sí, ahora, por decirlo así, soy más liviano; eso contribuye para que los tobillos resistan más y estén mejor en la competencia. Me siento fuerte”.

¿Qué sensaciones tiene al hablar de la posibilidad de ser otra vez campeón?

“No es algo imposible, yo tengo el nivel y la calidad. Lo importante es lograr una buena competencia, porque cada vez más la Serie Mundial se pone difícil”.

Y hay rivales fuertes y hasta las nuevas generaciones que vienen empujando...

“Hay que reconocer que yo ya estoy mayor y hay clavadistas nuevos que tienen más ganas -y eso no quiere decir que yo ya no las tenga-, se ven fuertes, tienen hambre de triunfo, igual, todos la tenemos, pero ellos vienen con más energía merced a su juventud. Es decir, la ponen difícil, pero igual, siendo el de mayor edad en la Serie, me siento con ganas y aún tengo cualidades para volver a ser campeón”.

Hablando de deportistas que les pisan los talones a los consagrados, ¿quiénes son ellos y qué se puede decir de los colombianos?

“Indudablemente que en el mundo hay material humano bueno que viene destacándose. De los diez que clasificaron a esta primera parada cualquiera puede quedar campeón al final del año. Aquí están los mejores y vienen haciendo carreras interesantes, los mexicanos, entre ellos, así como los colombianos Cristian Arayón y Miguel García, quienes a pesar de su poca experiencia tienen un futuro abierto, técnicamente son buenos, tienen mucha fuerza”.

Sus “pupilos” ¿cree que van bien o en qué deben trabajar para llegar, algún día, a ser el recambio, en este caso, para llenar el vacío cuando usted decida irse?

“Bueno, no es que sean mis pupilos, somos de la misma ciudad y han mostrado progresos impresionantes. Hemos entrenado juntos por mucho tiempo, como ya dije, les falta experiencia, pero afortunadamente ahora están compitiendo mucho más, necesitan entrar más en competencia, tener más seguridad, confianza y tranquilidad”.

¿En cuál de los dos confía más para llegar a remplazarlo en un futuro?

“En ambos; técnicamente son muy buenos, Cristian tiene más fuerza física pero Miguel es más tranquilo a la hora de la competencia, más suelto. Ambos tienen cosas buenas que les pueden servir. La idea aquí es que sigan trabajando fuerte, porque esto no es de resultados a corto tiempo, no es un cuento de un par de años, no, el proceso de los clavadistas de altura es a largo plazo, pero ambos van por el camino correcto”.

Hablando de su presente y futuro, usted dijo que al llegar a los 40 años estaría hablando de su retiro... Ya los cumplió, ¿piensa ya en el adiós?

“Tengo 40 años y el año pasado gané la Copa del mundo y la Copa Mediterráneo, fui cuarto en la Serie Mundial, entonces viendo estos buenos resultados, como que los años no me han afectado mucho, por ahora. Esto no es para siempre y mi mentalidad ha sido que mientras los resultados estén ahí seguiré disfrutando de la competencia. Hoy puedo decir, sin equivocarme, que disfruto de mi deporte, de viajar a los sitios que vamos. Me siento con fuerzas, me acompaña una buena salud. Mientras las cosas sigan así yo seguiré compitiendo”.

¿Su gran cualidad?

“Creo que mi gran cualidad es ser mentalmente muy fuerte. Logro concentrarme muy bien y manejar esa presión muy bien, eso me ayuda a tener a veces una competencia entera y poner presión a otros clavadistas que quizás no tengan esa misma fuerza mental y obligarlos al error”.

Y ser atrevido y vencer el miedo a las alturas...

“Fundamental para lograr el éxito y permanecer. Te brinda más confianza y seguridad”.

Entonces seguirá saltando como si nada, porque se tiene fe y porque su cuerpo aún no le ha dado ninguna señal para que se retire...

“Exacto, así es. Cuando pierda el gusto por este deporte o mi cuerpo se sienta cansado es porque llegó la hora, y aún no es”.

Te puede interesar

El empleo que busca está a un clic

Las más leídas

Te recomendamos

Utilidad para la vida

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD