Con incertidumbre. Así se encuentran varios entrenadores y deportistas de Antioquia, que prefieren no revelar sus nombres por temor a represalias. A los primeros solo se les firmó un mes de contrato -marzo- y los segundos aún no reciben las ayudas económicas de parte de Indeportes.
Pese a la situación siguen asistiendo a los escenarios a dirigir y entrenar, pues aseguran que los procesos no se pueden cortar.
Los técnicos confiesan zozobra en cuanto al empleo. Y expresan que entre los deportistas también hay inquietud. Han escuchado decir a sus dirigidos que si antes de la fecha límite para cambio de liga les hubieran mencionado cómo iba a ser la realidad, quizá habrían competido por otra región este año.
Sin embargo, la posibilidad está latente para el futuro porque hasta 2017 hay plazo para que un atleta se inscriba por otro departamento para representarlo en Juegos de 2019.
Comentan que a pesar de la motivación con la que llegan a cada escenario, las necesidades terminan tocando al grupo de trabajo.
Indeportes da la cara
La preocupación es compartida, como lo expresó ayer Hernán Darío Elejalde, gerente de Indeportes, quien trabaja para conseguir recursos: “la realidad es que nos dejaron en el presupuesto de 2015, para entrenadores, 1.300 millones de pesos para todo el año y contratar a los 170 que hay en las 44 ligas valen 600 millones al mes. O sea que solo dejaron dinero para dos meses”.
Dice que en el tema de incentivo a deportista pasó algo similar. Quedaron $770 millones y al mes se les debe pagar la suma de 300. “Aún no se sabe si hay recursos del balance en la Gobernación que nos permitan inyectar un poco los de nosotros. Esa fue la realidad que nos dejaron, y con esa realidad tenemos que trabajar hasta que haya plan de desarrollo que determine el capital para cada dependencia”.
Elejalde señaló que a través de Fedelian hizo un contrato para entrenadores de 800 millones de pesos por tres meses. “Me toca trabajar con lo que hay, optimizando y priorizando. Hubo descuido, cómo dejan ese presupuesto en un año olímpico. En un acto de responsabilidad, mínimo debieron dejar garantizado el dinero hasta junio o julio mientras la nueva administración organiza presupuestos”
