En 1999, Colombia y Medellín pasaban por un periodo grave en materia de orden público y, por eso, era muy difícil que figuras importantes visitaran el país.
Pero las directivas de Inexmoda se pusieron como objetivo buscar una figura de talla mundial y traerla a la feria Colombiamoda, “para sacarnos de ese ostracismo internacional, porque nadie quería venir al país”. La que recuerda esta anécdota es Alicia Mejía, directora de Inexmoda, quien empezó una estrategia de llamadas mensuales a la oficina de un gran diseñador: Óscar De la Renta.
“Como a los nueve meses me dijeron que Óscar me recibiría en su oficina de Nueva York. Cuando entró, sentí su carisma. Hablé largo rato con él y le expliqué mi propósito. Por fin me dijo: 'Mira, yo tengo un compromiso con mi familia en Punta Cana (República Dominicana) por esas fechas que me propones. Y como no hay un vuelo directo desde Medellín, me tocaría devolverme a Nueva York y de ahí a Punta Cana, por lo que me perdería la reunión familiar si voy a la feria'”.
Sin vacilar, la señora Mejía le dijo “yo le pongo el avión”, aunque no contara con ninguna aeronave.
Cuando salió del despacho del diseñador, Alicia Mejía llamó del primer teléfono público que encontró al empresario antioqueño Carlos Manuel Echavarría. Casi sin responder al saludo, le dijo “necesito tu avión”.
“Carlos tenía clara la importancia de esa visita para Medellín y, sin dudar un instante, me dio el contacto con su piloto para empezar a coordinar su viaje”.
Y de esta manera, en 1999, Óscar De la Renta abrió el camino para que otros grandes nombres de la moda mundial conocieran la importancia de la feria que anualmente se desarrollan en Medellín y quisieran estar en ella.
Julián Posada, consultor de moda, también destaca la importancia de esa primera visita a Colombia, "Lo que este hombre hizo por nosotros como ciudad, como país, es algo para agradecerle siempre, fue un hombre completamente generoso con Colombia", concluye.
Pico y Placa Medellín
viernes
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