Tras dos semanas en las que cerca de 340 familias invadieran dos grandes predios del corregimiento de Capurganá en el municipio de Acandí, Chocó, Édgar Mejía, presidente del Consejo Comunitario y vocero de las familias, habló con El COLOMBIANO y explicó que la razón para que estas personas invadieran los predios es la falta de una “vivienda digna”.
Cabe recordar que estas invasiones no solo han sido denunciadas por las autoridades civiles y policiales de Acandí, sino también por la comunidad, que ha manifestado temor de que los invasores sigan ocupando más predios y que además afecten la naturaleza. Algunos habitantes han denunciado además amenazas contra su vida y en general en la zona hay temor frente a lo que pueda pasar con estas invasiones, cuando faltan 15 días para empezar la temporada vacacional.
El líder Mejía explicó que las acusaciones que les hacen son infundadas y que lo que reclaman es que les cumplan con las promesas de vivienda, acueducto y salud que los gobiernos de turnos les hacen.
“Capurganá no es el paraíso que siempre dicen. En vivienda estamos muy hacinados, por eso, recurrimos a las invasiones. En un lado hay 220 familias y en otro hay 120, son dos invasiones. Los dueños de los lotes tanto el de los pilotos como el señor Ciro Arévalo están buscando la forma de negociar con la comunidad, por lo que están dando precios para que la gente se acomode, pero los propietarios quieren negociar el lote completo y no predio por predio”, dijo.
Ahora bien, si las necesidades básicas insatisfechas de Acandí llevan años sin resolver, ¿por qué ahora protestan? Mejía explicó que parte de la situación se generó debido a que los turistas se han ido quedando a vivir en Capurganá lo que ha generado hacinamiento. “Por esa razón, se está abriendo espacio de una forma que ellos vieron conveniente, además, la ley de víctimas dice que nosotros tenemos derecho a una vivienda digna y nunca nos la han dado. La copa se llenó con todos los desplazados que tiene Capurganá y que no nos están atendiendo. La mayor parte de los que están ahí son víctimas”, señaló.