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Al Gobierno se le formó un trancón de quejas y reclamos por el nuevo esquema de avalúos que sirve para determinar la base sobre la que se paga el impuesto vehicular, uno de los principales ingresos de las gobernaciones del país. En algunos casos, la liquidación del tributo aumenta notablemente.
Para los gremios del sector, la nueva metodología que contempla la Resolución 5358 de 2015 del Ministerio de Transporte, aumenta el avalúo comercial de los vehículos usados incluso entre 30 y 50 por ciento.
El presidente de la Asociación del Sector Automotriz y sus Partes (Asopartes), Tulio Zuloaga, aseguró a Colprensa que el esquema es absurdo, pues no se tiene en cuenta la depreciación de los automotores. El directivo calcula que un carro al salir de la vitrina pierde 20 por ciento de su valor.
No obstante, el Gobierno insiste en que la actualización de la tabla de avalúos se realizó en pro de la equidad al determinar el valor comercial de los vehículos.
Con la nueva metodología se crearon 5.300 nuevos rasgos para discriminar los vehículos en un total de 8.357 categorías, que van desde tener rines de lujo y aire acondicionado hasta claraboya.
El viceministro de Transporte, Enrique José Nantes, aseguró en una rueda de prensa que, “el Ministerio no está creando impuestos. Lo que ha hecho es actualizar las tablas. Este año en particular, teniendo en cuenta las sugerencias de las secretarías de Hacienda, decidió mediante un proceso de consultoría técnica, que se pudieran desagregar más las líneas de vehículos que existen en el país”.
El funcionario destacó que sólo el 3,1 por ciento de los vehículos sufrió un aumento de 10 por ciento sobre el avalúo de 2014. “El resto del universo está por debajo de ese porcentaje o mantuvo su valor”, agregó Nantes.
Pero Zuloaga no le cree: “hay vehículos de gama alta, en los que el alza está entre 80 y 100 por ciento”.
En un sondeo hecho por el diario La República, que tuvo en cuenta bases gravables de 2015 y 2016 de algunos de los vehículos más vendidos en el país, encontró que hay aumentos que oscilan entre 3 millones y hasta más de 10 millones de pesos.
Mientras la polémica sigue viva, Asopartes solicitó a la Ministra de Transporte, Natalia Abello, derogar el nuevo esquema. En carta dirigida a la funcionaria y conocida por Colprensa, el gremio asegura que, al analizar las nuevas 116 tablas de valores, hay vehículos que no se desvalorizan con el tiempo y contradicen la lógica comercial, pues aumenta su avalúo. Para Zuloaga, lo que busca el Gobierno es que los dueños de vehículos paguen más.
“Solicitamos la suspensión de esta resolución (No. 5358), mientras se logra una tabla lógica, de acuerdo con el verdadero valor comercial de los vehículos”, dice la carta del gremio.
Ante las quejas, al Gobierno le tocó mediar, y por eso el próximo miércoles se reunirá con las asociaciones de transportadores y comercializadores del país.
“Esta decisión no sólo tiene efecto sobre el valor del impuesto, también tendrá consecuencias contables y tributarias. Además, la empresa que hizo el nuevo esquema dejó por fuera varias líneas de vehículos”, indicó a Blu Radio, Orlando Ramírez, presidente de la Asociación de Transportadores de Carga (ATC).
También se conoció que la Procuraduría General de la Nación estaría analizando el tema y se pronunciará la próxima semana.
Al aumento en los impuestos vehiculares, producto del cambio en los avalúos, se le suma un nuevo problema. La empresa contratada por el Gobierno para hacer la nueva metodología, Datasoft, ha sido cuestionada desde distintas orillas.
La compañía pasó de ser una pequeña empresa dedicada a la compra y venta de computadores, a tener competencias para determinar la base de impuestos para más de 7 millones de vehículos que ruedan por el país.
Ante las críticas, el viceministro aseguró que Datasoft cumplía con todos los requisitos para participar en el concurso de méritos abierto.
El gerente de la empresa, Diego Álvarez, indicó a Blu Radio que los precios que tuvieron en cuenta sí corresponden a los del mercado. Agregó que había carros de gama alta que estaban pagando lo mismo que los de gama media. Por eso, tras el ajuste, se discriminó mejor la clasificación.
El contratista aseveró que su empresa recomendó al Gobierno no aumentar la base gravable en un solo envión, y hacerlo paulatinamente, observación que el Ministerio no tuvo en cuenta.
Ante el descontento generalizado, al Gobierno le tocará sacar el escudo en el Congreso. El senador Fernando Tamayo, del Partido Conservador, cuestionó la metodología utilizada y, Carlos Guevara, del Movimiento Mira, anunció que citarán a un debate de control político.
Entre tanto, cada ciudadano puede revisar, en la página web del Ministerio de Transporte las tablas actualizadas por tipo de vehículo. Los documentos pueden ser descargados de la página www.mintransporte.gov.co/publicaciones/tablas_2016.
A FAVOR
Enrique Nates
Viceministro de Transporte
“Estamos tranquilos, pues el procedimiento que se adelantó para el nuevo cálculo tuvo en cuenta variables como la depreciación de los vehículos en el mercado, la inflación, la tasa de cambio y la dinámica de oferta y demanda en Colombia”.
EN CONTRA
Jaime Amín
Senador Centro Democrático
“Nos están metiendo una pequeña reforma tributaria disfrazada que golpea seriamente al ciudadano. Es inconcebible que este gobierno siga cargando de impuestos excesivos a la gente mientras ellos siguen su política de cero austeridad”.