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Las personas con ingresos mensuales este año superiores a 1,48 millones de pesos tendrían que declarar renta en 2017, si el Congreso aprueba esta propuesta que sugirió la Comisión de Expertos Tributarios para que el Ministerio de Hacienda la incluya en el proyecto de ley que se presentaría en marzo próximo.
Esos 1,48 millones de pesos equivalen a 600 unidades de valor tributario (UVT) vigentes en 2016, tal como lo planteó dicha comisión en el robusto informe final presentado al Gobierno y al que tuvo acceso EL COLOMBIANO.
A los 2,08 millones de declarantes personas naturales actuales, se le sumaría un ejército de contribuyentes que llega a los 3 millones de colombianos, según calcula la misma Comisión. Hasta ahora, quien ganó en 2014 más de 3,26 millones de pesos al mes debió declarar impuesto renta en 2015.
Asimismo, la comisión expone que “el umbral (de lo que declaran actualmente) es dos veces más elevado frente al promedio de América Latina y doce veces más alto que el promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde)”.
En el documento argumentan que el recaudo por el gravamen de renta no es tan bajo en comparación con otros países. Sin embargo, si sólo se tiene en cuenta lo declarado por personas naturales es menor a uno por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y sólo el 15 por ciento de todo lo que se recoge por ese concepto.
El director de la Dian, Santiago Rojas Arroyo, aseguró ayer que la nueva reforma tributaria es necesaria, pues los impuestos en Colombia son muy elevados, en especial, para unas empresas y ciertas personas naturales. En ese sentido, acogería la proposición de la comisión en la que busca ampliar la base de declarantes.
Lo que seduce de la idea
Ahora, ampliar la base de declarantes permite tener mayor trazabilidad de los ingresos y procedencia de los mismos.
Se plantea que quien gane este año entre 1,48 millones de pesos (600 UVT) y 2,47 millones (1.000 UVT) al mes, asuman una tarifa promedio impositiva del 2,5 por ciento.
Para los que reciben entre 2,47 millones y 4,95 millones de pesos (2000 UVT), la tarifa subiría a 9,3 por ciento, y así, progresivamente hasta un tope de 35 por ciento para quienes ganan más de 10,16 millones de pesos mensuales (4.100 UVT).
Y aunque sea impopular, estos rangos, a juicio de la Comisión, no son altos frente a los referentes internacionales (ver gráfico).
Los expertos aseguran que los amplios beneficios vigentes que tiene el impuesto de renta hace que las personas naturales no tributen una cifra significativa y sí representan dinero que deja de entrar al erario. “Por estos beneficios se dejan de percibir más de 3,5 billones de pesos al año, algo como 0,5 por ciento del PIB”, detalla el informe final.
Pero las explicaciones de la Comisión también tienen posturas en contra.
“Es una propuesta que no tiene sentido. El alcance de la tributación de las personas que ganan 1,78 millones de pesos es muy reducida. Entonces, lo que generará en recaudo es algo marginal, pero sí logrará congestionar y hacer más complejo el manejo administrativo de los impuestos”, aseguró a EL COLOMBIANO, el exdirector de la Dian, Gustavo Cote Peña.
Para el experto, el impuesto para las personas que ganan más de dos salarios mínimos está explicado en muchas ocasiones en la retención en la fuente, por lo que no ve eficiente esta propuesta.
En ese mismo sentido el tributarista y exsubdirector de la Dian Juan Camilo Serrano Valenzuela asegura que tendrá un efecto contrario al necesario: “podría generar saldos a favor para algunos declarantes, entonces, ¿cuál será el impacto?”.
No obstante, la simple ampliación de la base también trae otra complejidad. “Veríamos a gente buscando contadores que les cobrarían una suma para tener que tributar, cifras muy bajas, y se expondrían a más complicaciones y trámites que, aún hoy no son efectivos ni para los declarantes ni para la Dian”, acotó el consultor Julio César Leal, quien también trabajó en la Dian.
Claro está que uno de los puntos a favor de esta propuesta sería agrandar la lupa de la Dian y controlar la evasión tributaria. Sin embargo, la ecuación no sería tan sencilla.
Para Leal Duque, afirma que realmente se traduciría en un aumento de la evasión. “Con una base de declarantes mucho más amplia, una persona con muchos activos para presentar a la Dian puede optar por ponerlos a nombre de muchas personas que, a su vez, tienen que declarar, pero a los cuales los topes no generaría un impuesto significativo, es decir, más evasión”, agrega el consultor y quien también estuvo vinculado a la Dian.
Pero en una cosa sí coinciden los expertos de la Comisión convocada por el Gobierno y los tributaristas consultados por este diario: la recomendación de desaparecer el Imán y el Imás, sistemas para determinar la renta en personas naturales.
Estos se cambiarían, si se acoge la propuesta, por “un tributo único que distingue las rentas por trabajo de otras”. Esto simplificaría para las personas naturales la liquidación de la declaración y el pago de renta y le quitaría muchas confusiones al sistema.
Con todo, concluye Serrano, el resultado de la Comisión se divide en dos: “vimos un juicioso estudio del sistema tributario colombiano, donde se aprecian falencias estructurales en esta materia. Pero, estas recomendaciones demuestran que son para una reforma coyuntural, para ayudar a cerrar el déficit fiscal del Gobierno, no van más allá”.