De los 22 años que lleva vigente la Comisión Permanente de Políticas Salariales y Laborales, y solo en seis oportunidades el salario mínimo se ha dado por acuerdo y no por decisión unilateral del Gobierno, debido a la diferencias relevantes entre las sociedades sindicales y los empresarios (ver Paréntesis).
Así lo recuerda Mauricio Jaramillo Jassir, director del observatorio laboral de la Universidad del Rosario, aunque mencionó también que el año pasado estuvieron de acuerdo las partes con la Confederación General de Trabajo (CGT), la Confederación de Trabajadores de Colombia, pero no se llegó a una posición unificada con la Central Unitaria de Trabajadores (CUT).
Hoy, pese a la intención del gobierno, la distancia que separa a los tanques de pensamiento como la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif) y Fundación para la Educación Superior y el Desarrollo (Fedesarrollo) es muy amplia del “4% y 5 % frente al 10 % y 12 % de los sindicatos”, agregó Jaramillo Jassir.
El entorno no es tan favorable, teniendo en cuenta los que la reforma tributaria, denominada “ley de financiamiento” ha puesto un entorno hostil, frente a las centrales obreras.
La intención del gobierno, encabezado por la ministra de Trabajo, Alicia Arango Olmos, es llegar a un acuerdo y definirlo “antes del 15 de diciembre, fecha en que se cumple el primer vencimiento”, según lo que ordena la Ley 278 de 1996.