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Este jueves se instaló oficialmente la reunión anual de la Asociación de Economía de América Latina y el Caribe (Lacea) y del Encuentro Latinoamericano de la Sociedad de Econometría (Lames), en el Auditorio Fundadores de la Universidad Eafit.
Al evento asisten 900 invitados nacionales e internacionales, que debatirán hasta el próximo sábado las investigaciones económicas de académicos, expuestas en unas 400 ponencias.
La ceremonia de inauguración fue presidida por el gerente del Banco de la República, José Darío Uribe; el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas Santamaría; el gobernador de Antioquia, Luis Pérez Gutiérrez; el rector de la Universidad Eafit, Juan Luis Mejía; el presidente de la Sociedad de Econometría (Lames) Eddie Dekel; el presidente de Lacea, Eduardo Lora y el decano de Economía de la Universidad Eafit, Juan Felipe Mejía.
El ministro Cárdenas indicó en su intervención que este evento refleja la existencia de una promoción e interés por la economía como motor de desarrollo, “al pretender ampliar la frontera del conocimiento para beneficio de las políticas públicas”.
Asimismo, indicó Cárdenas que este conocimiento permite tomar decisiones basadas en la evidencia.
“Construimos unos principios basados en la estabilidad macroeconómica, sin caer en decisiones populistas, porque lo vivimos en nuestra propias fronteras y sabemos lo costoso que resulta esta práctica para las finanzas públicas”, dijo Cárdenas.
A su turno el gerente del Banco de la República, José Darío Uribe, destacó que entre 2005 y 2015 el PIB colombiano creció al 3,4 % promedio anual, se enfrentó la crisis global y fue posible hacerlo con una política monetaria de ‘contraciclicidad’, tras el desplome de los precios del petróleo, desde 110 dólares el barril hasta 30 dólares.
“La disminución en el ingreso nacional fue uno de los efectos, así como el deterioro en los términos de intercambio. Esto produjo una desaceleración de la demanda interna, sumado al débil comercio externo e hizo que la tasa de crecimiento estimado para este año sea del 2 %”, apuntó Uribe.
Además, explicó a los presentes que la pérdida de la rentabilidad petrolera debilitó las finanzas de la nación, que representaron cerca del 20 % en 2013 y alertó a las firmas calificadoras de riesgo, choque que coincidió con la menor expansión monetaria de Estados Unidos, lo que produjo el alza en las primas de riesgo soberano de economías emergentes como la colombiana.
“La caída en los ingresos de exportación generó un amplio déficit en cuenta corriente, sumado a menor inversión extranjera por cuenta del sector petrolero, además del encarecimiento del endeudamiento externo, elementos que causaron una fuerte depreciación del peso (cerca del 60 % desde 2014 y mediados de 2016), a pesar que el traspaso de la depreciación de los precios es bajo a los productos en Colombia”, añadió Uribe.
Más allá de una conclusión definitiva, Lacea-Lames pretende ser un espacio de debate académico para pulir diferentes investigaciones con impacto en la sociedad.