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La Organización Mundial de la Salud declaró que es posible que haya un vínculo entre el virus zika y un inusual defecto congénito en que los bebés nacen con cabezas pequeñas, pero aclaró que hasta ahora la evidencia ha sido circunstancial.
Christian Lindmeier, portavoz de la OMS, dijo a reporteros el martes que la agencia adscrita a la ONU tiene “la enorme tarea” de comprobar el nexo entre el virus y la microcefalia.
Añadió que el jueves la OMS sostendrá una reunión especial en Ginebra sobre el tema, en el marco de la reunión de su junta directiva.
El virus, recalcó, fue vinculado a casi 4.000 casos de microcefalia en Brasil. El Salvador, Panamá, Colombia y Cabo Verde están sufriendo de “graves brotes” de la enfermedad, expresó.
Lindmeier dijo que “el enorme aumento” de los casos de zika “nos da muchas razones para preocuparnos”.