Los poetas parecen haberlo sabido siempre, pero hasta ahora no se había usado evidencia a gran escala para relacionar los estados de ánimo con las condiciones meteorológicas. Se intuye, a través de evidencia anecdótica, que los humanos prefieren los días cálidos y soleados en lugar de los fríos y húmedos, pero pocos datos empíricos respaldan esto.
Recientemente un equipo de investigación liderado por Patrick Baylis en la Universidad de Stanford comenzó suponiendo que el estado de ánimo humano se refleja en expresiones y por esto usaron Facebook y Twitter para rastrearlas. Según Baylis y su equipo de investigadores esta es la mayor investigación en la que se relaciona el clima y los estados de ánimo. El trabajo se publica en una plataforma de artículos que indica aún no se revisa por otros investigadores pares.
El equipo analizó algorítmicamente 3.500 millones de tuits y publicaciones de Facebook escritas en los Estados Unidos entre 2009 y 2016 buscando expresiones de sentimiento relacionadas directa e indirectamente con el clima. No solo miraron los mensajes sobre una tormenta de nieve, sino que también analizaron lo que las personas escribieron cuando no estaban considerando explícitamente las condiciones climáticas, todo esto con el fin de evaluar cómo el clima podría afectar inadvertidamente lo que escribieron las personas.
Los investigadores determinaron si las personas expresaban positividad o negatividad usando una herramienta de clasificación de sentimientos llamada Contabilidad de palabras de investigación lingüística, comúnmente utilizada por los científicos sociales para evaluar los sentimientos detrás de la escritura en las publicaciones de las redes sociales. Esos sentimientos se notaron y los mensajes recopilados se asociaron con momentos específicos, lugares y condiciones climáticas.
Los datos meteorológicos considerados incluyeron la temperatura máxima diaria, el rango de temperatura, las medidas de precipitación, la nubosidad y las estadísticas de humedad relativa, todas medidas consideradas centrales en la relación entre el clima y los estados emocionales en estudios previos y más pequeños. Los investigadores escriben que pudieron encontrar “evidencia sustancial de que las condiciones meteorológicas menos ideales se relacionan con un sentimiento empeorado”.
Específicamente, notaron que las temperaturas frías, las altas temperaturas, las precipitaciones, los rangos de temperatura diaria más estrechos que ofrecen poco cambio de las condiciones constantes desagradables, la humedad y la nubosidad se asociaron con expresiones de sentimiento negativas, incluso cuando se excluyen las publicaciones que tienen que ver con el clima.
Y el tamaño del efecto es significativo. Para descubrir qué tan significativo, el equipo midió el cambio en el sentimiento asociado con eventos específicos, como el terremoto de agosto de 2014 en Oakland y San Francisco, el ataque terrorista de San Bernardino en 2015, y así sucesivamente.
Luego compararon este cambio en el sentimiento con el clima frío y descubrieron que eran similares en magnitud.
Parece que el clima es muy importante para nosotros. Las condiciones de congelación influyeron en las expresiones negativas de las personas tanto como los terremotos y los ataques terroristas, según encontraron los investigadores. En la medida en que las expresiones escritas sirvan como un indicador válido (aunque aún ruidoso) sobre las emociones subyacentes, ahora se puede asegurar que hay evidencia “de que el clima puede alterar funcionalmente los estados emocionales humanos”.