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¿Sirven los juegos para entrenar el cerebro?

Estudio sugiere que esos juegos de computador y aplicaciones para ejercitar la mente poco sirven. Hay otras opciones.

  • ilustración sstock
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05 de octubre de 2016
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Si no es capaz de concentrarse, si se queda corto para solucionar problemas o si piensa en prevenir el declive mental por los años, hay una solución.

Eso dice la industria de entrenamiento cerebral, que genera mucho dinero. Y aunque algún sector se escuda en estudios científicos, parecen controvertibles.

Una industria multimillonaria basada en la promesa de que simples juegos de conocimiento pueden mejorar varias capacidades cognitivas necesitadas todos los días.

Juegos de computador, aplicaciones para ejercitar la mente. ¿Funcionan? No, dice una extensa revisión de estudios sobre el tema publicada en Psychological Science.

Todos esos programas, según un informe de esa revista, se basan en la idea de que practicar unas habilidades básicas conducirán a mejorar una amplia variedad de capacidades. Pero Daniel J. Simons y colegas analizaron los hallazgos de estudios en las revistas, citados por las empresas entrenadoras de la mente.

Hallazgos

La revisión encontró que las tareas de entrenamiento cerebral parecen mejorar el desempeño en esas tareas, pero es menos evidente que lo mejoren en tareas parecidas, relacionadas y muy poco evidente que mejore el desempeño diario cognitivo.

Varios de los estudios citados por la industria tienen problemas metodológicos.

Y como los niños y los adultos con déficit cognitivo pueden ser los más atraídos a los ofrecimientos de la industria, debería exigirse un mayor estándar de evidencias sobre los beneficios que ofrecen.

Porque hay otras opciones, pero no gozan de la publicidad de los nuevos medios, explicaron los investigadores Jennifer McCabe, Thomas Redick y Randall Engle, quienes acompañaron el estudio de Simons con un comentario.

Opciones

Son alternativas de bajo costo para mejorar la memoria respaldadas en décadas de investigación aplicada.

Estudios han demostrado que las personas recuerdan mejor la información cuando la codifican de distintas maneras y elaboran conexiones lógicas con el material. Una elaboración mediante imágenes, dispositivos mnemotécnicos y la creación de conexiones personales para recordar facilitan la recordación.

Y preguntarse uno mismo en vez de solo releer ayuda a recordar.

A ejercitar la memoria.

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