En la misma casa donde se gestó la vida del prócer de la independencia Atanasio Girardot, en Santa Fe de Antioquia, Comfama instaló una nueva sede principal para el Occidente, un lujo que pocas entidades se pueden dar -funcionar en un inmueble patrimonial- y que también implica un compromiso: seguir conservando el lugar y e incluso llenarlo de nueva historia.
Todo empezó hace tres años, cuando la caja de compensación pensó en tener una sede en el Occidente para beneficio de los afiliados y sus familias y con la idea de apoyar las empresas que le apuestan a crear desarrollo en la ruralidad, explica David Escobar Arango, gerente de Comfama.
Y la municipalidad elegida no podía ser otra que Santa Fe, donde estaba la casa de Atanasio Girardot, o mejor la de sus padres, Louis Girardot (parisino que llegó a la región atraído por el oro) y María Josefa Díaz, una heroína santafereña que se robó su corazón y cuya unión le dio vida al que años más tarde sería llamado el Héroe de Bárbula, un patriota que murió en la lucha por la libertad de la Patria.
Si bien la historia dice que Atanasio nació en San Jerónimo y que desde niño fue llevado a Bogotá, donde se hizo militar, sus padres sí habitaron la vivienda, un caserón colonial con rasgos republicanos y más de 250 años de construido.
“Lo que narra la historia es que a María Josefa la transportaban en silleta en la ruta al Aburrá para el parto, pero en el camino el nacimiento se precipitó y el prócer nació en San Jerónimo”, relata Juan Simón López, del equipo de Cultura de Comfama.
La casa, que tiene un área total de 3.125 m2, 1.100 de ellos construidos, fue adquirida por Comfama a sus últimos poseedores, la familia Martínez Arango, que por su arraigo a la historia y a Santa Fe, supo cuidar el inmueble respetando su condición patrimonial y su armonía arquitectónica.