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Manicurista relata caso de racismo en Medellín

  • La Personería de Medellín ya está al tanto de la situación, sin embargo, no se han presentado denuncias legales. Foto: Instagram @elizmosquera
    La Personería de Medellín ya está al tanto de la situación, sin embargo, no se han presentado denuncias legales. Foto: Instagram @elizmosquera
15 de septiembre de 2020
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A Elizabeth Mosquera, una manicurista de Medellín, le negaron entrar a una casa en el barrio Santa Mónica, ubicado en la comuna 12, por “no ser blanca”.

La historia empezó el viernes, cuando una mujer identificada como “Yeni” le escribió a su whatssap para solicitar un servicio a domicilio. “Le conté mis precios y mi horario y quedé en ir a atenderla al día siguiente a su casa”, narró Elizabeth.

El sábado, mientras se dirigía al lugar, Yeni le escribió que no tardara tanto, que cogiera un taxi y que ella se lo pagaría cuando llegara a casa. Elizabeth hizo lo que su clienta le había indicado y abandonó el metro para llegar más rápido.

Mosquera llegó a la vivienda y tocó la puerta en repetidas ocasiones, pero nunca le abrieron. “Señora, le estoy tocando hace rato”, le escribió.

“Elizabeth, pero es que yo pensé que usted era blanca, con esos trabajos tan lindos me equivoqué. Yo no permito que negros entren a mi casa”, dijo Yeni en un acto de evidente de racismo y discriminación social.

Después de ese momento, Elizabeth miró la pantalla de su celular y, en medio de la rabia y el desconcierto, decidió irse sin decir nada más. Ese sábado ella perdió su tiempo y su dinero mientras se desplazaba hacia Santa Mónica, pero eso, quizás, es lo más irrelevante. “Yo perdí mi tranquilidad, me da miedo salir a trabajar porque esa señora me amenazó después de todo esto”, dice Mosquera en medio de la nostalgia mientras cuenta que de su trabajo como manicurista depende el sustento de sus dos hijos, su mamá y de ella misma.

Cuando llegó a casa, ese mismo día, Elizabeth publicó en su cuenta de Facebook las capturas de pantalla del chat en el que Yeni le había negado la entrada a su casa. La indignación fue inmediata: su circulo de amigos “que eran muy pocos en esa red social”, según cuenta ella, empezaron a replicarlo en Facebook, Twitter e Instagram y miles de usuarios en esas redes sociales repostearon la denuncia con palabras de apoyo. “En pleno siglo XXI, ¿en serio?”, “No puedo con esto, de verdad me duele todavía que haya gente así en el mundo” fueron algunos de los mensajes con los que respondieron.

La denuncia creció mucho más de lo que a Elizabeth le hubiese gustado, tanto que personalidades como el exfutbolista René Higuita y el comediante “Suso el Paspi” la dieron a conocer en sus redes sociales y varios medios la contaron como una historia de racismo que se vivió en Medellín.

“Tengo medio. Tengo mucho miedo de que me pase algo a mí o a mi familia”, decía Elizabeth desde el pasado lunes en que la contactamos para que nos contara su historia. Teme porque, luego de sus publicaciones en Facebook, recibió otro mensaje de Yeni en su whatsApp donde la amenazaba por haber denunciado y por haber dado su número en esa red social.

Por ahora Mosquera no ha realizado ninguna denuncia formal, dice que sigue teniendo miedo a pesar del apoyo que han demostrado los cibernautas y que lo único que quiere es “trabajar y seguir la vida sin miedo”.

Después de hablar con Mosquera, EL COLOMBIANO contactó a la Personería de Medellín para saber si ya tenían conocimiento del caso. Allí dijeron que ya se habían comunicado con Elizabet Mosquera, pero que no había querido decir mucho cuando se pusieron en contacto con ella porque manifestaba tener miedo.

Según explicó la entidad, para este tipo de casos la Personería municipal tiene una Unidad Especial de Asuntos Etnicos y Migrantes, recientemente creada, que cuenta con el apoyo de Usaid ( Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional) y de Organización Internacional para las Migraciones.

En ella se encargan de “la garantía y del restablecimiento de derechos con enfoque diferencial dirigido especialmente al grupo NAR, negros, afrodescendientes, raizales y Palenqueros; y a los indigenas y migrantes que habitan la ciudad”, explicó Lidi Mari Palacio, coordinadora de la Unidad.

“Nos encargaremos de que los derechos de estas personas sean respaldados y de que estos sujetos de especial protección no se le sigan vulnerando sus derechos”, concluyó Palacio.

Mientras tanto Elizabeth Mosquera sigue recibiendo mensajes de solidaridad desde diferentes lugares del país.

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