“Queremos que nuestro municipio sea nombrado como distrito cultural”, expresó Juan Sebastián Abad, alcalde de La Estrella, en una audiencia pública del Plan de Desarrollo el pasado 30 de abril, para referirse a una de las prioridades de la administración en el cuatrenio que inicia: impulsar el turismo. El documento ya fue radicado ante el Concejo y ahora continúa un periodo de discusiones y ajustes sobre el que tienen puesta la lupa los veedores del documento.
“La Estrella no tiene una vocación, y estamos construyéndola con un componente importante de turismo”, aseguró Ana Sánchez, secretaria de Participación del municipio. El propósito es “impulsar la economía naranja con intervenciones urbanísticas que incorporen temas de patrimonio, cultura y muralismo”.
Para esto, la Casa Consistorial sería adecuada como un museo con exposiciones itinerantes y un teatro, aseguró la Secretaria. Además, entre los principales proyectos se cuenta la construcción de una ciclorruta sobre la vía férrea para conectar a La Estrella con Caldas, y también la creación de un Centro de Desarrollo Infantil en Pueblo Viejo.
En efecto, el documento muestra que de los $214.805 millones que dispone el Municipio para invertir durante cuatro años, el mayor rubro fue asignado al eje estratégico Equipamento para el desarrollo (32% del total del presupuesto), seguido de Salud y promoción social (26%), y Desarrollo humano (25%). Con menos recursos, siguen los ejes Desarrollo Sostenible (8%) y Gobierno y gestión territorial (8%).
El proceso de participación incluyó 30 mesas de discusión a las que asistieron 1.200 líderes de la comunidad. En estos espacios, aseguró Sánchez, los ciudadanos identificaron como prioridades la protección del medio ambiente y la reducción de la construcción.
Y aunque Abad expresó en la audiencia que “queremos construir una biociudad”, según Ignacio Rojas,integrante del Consejo Territorial de Planeación (CTP) en representación del sector Ambiental, este componente no tuvo suficiente fuerza en el documento.
“Lo ambiental está agrupado en el mismo eje estratégico con lo económico, y eso le resta prioridad. Las problemáticas en este tema son mucho mayores a los esfuerzos que se expresan en el Plan”. Los indicadores de resultado, explicó Rojas, son poco ambiciosos: “se menciona una meta para el cuatrenio de solo 100 personas sensibilizadas sobre cambio climático y solo 90 hectáreas restauradas, por ejemplo. No se menciona formación a la ciudadanía en economía circular, ni delimitación del Distrito de Manejo Integrado en la reserva El Romeral”. Además, cuestionó, el presupuesto es “irrisorio”: solo un 2% del presupuesto total será destinado para el medio ambiente.