Una decisión de la Secretaría de Movilidad de Bello generó la protesta de tres municipios vecinos. Argumentando que había alto flujo vehicular y congestión, los bellanitas prohibieron el tránsito de las rutas intermunicipales y metropolitanas por la Autopista Norte, entre la estación Niquía de la línea A del metro y el intercambio vial de Solla. Los buses deben desviarse por la Avenida Regional
La medida entró en vigencia el pasado 9 de mayo y tomó por sorpresa a los ciudadanos, pues la mayoría han tenido que pagar dos pasajes para llegar hasta sus destinos.
Orlando Gómez, residente de Copacabana, aseguró que la restricción obligó a muchas personas a pagar doble pasaje para llegar a su destino.
“En esta vía hay muchos centros médicos, entonces cuando venimos a una cita o reclamar medicamentos los buses nos dejan muy lejos. Nos toca pagar más”, dijo.
Los conductores de las rutas intermunicipales también están inconformes con la prohibición, pues los usuarios están desistiendo de sus viajes. “Todo esto me afecta mucho porque el 60 % de la gente que se sube al bus viene a trabajar a las empresas (que tienen sede) en Bello, como Postobón y Cotrafa”, dijo Luis Carlos Hernández Muñoz, conductor de Copacabana.
Por ahora, los únicos exentos de la prohibición son los vehículos que cubren las rutas integradas al metro para el norte del Aburrá.
En redes sociales la ciudadana Deisy Correa cuestionó la decisión y pidió que la secretaría de Movilidad de Bello explique, con estudios en mano, si la medida sí tiene un interés técnico y no económico. Hasta ahora no ha habido una respuesta oficial a su pregunta.