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El centro de Medellín llora a uno de sus artistas más queridos: murió el Muñeco Zed
Los problemas de salud tenían a este artista, de 36 años, sin poder salir a las calles desde hace varios meses. Falleció en la Clínica León XIII, de Medellín.
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José Daniel Duarte Peña, quien era conocido como el Muñeco Zed, dejó como legado su arte y sus particulares movimientos de maniquí. FOTO: YULIANA ZULETA VILLEGAS -
Los movimientos del Muñeco Zed eran admirados por quienes recorrían el pasaje Junín. FOTO: YULIANA ZULETA VILLEGAS
08 de febrero de 2023
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Por cuenta de los quebrantos de salud que lo aquejaban desde hace varios meses, el Muñeco Zed, un reconocido artista callejero del centro de Medellín, falleció a las 5:00 de la mañana de este martes en una cama UCI de la Clínica León XIII, de Medellín. La comunidad del pasaje Junín, donde solía presentarse, lamentaron su fallecimiento, al tiempo que denunciaron el abandono en el que se encontraba.
José Daniel Duarte Peña, nombre de pila de este artista, murió a sus 36 años. Los quebrantos de salud hicieron que sus cólicos y la hinchazón en sus pies le impidieran los últimos meses de su vida tomarse este corredor céntrico donde lo vieron hacer su presentación de la estatua humana durante más de 25 años.
En medio de su agonía, fue poco el apoyo que recibió. Cuando su enfermedad se agravó, el grupo de influenciadores “Los locos de Medellín” y gestores culturales de la ciudad hicieron una campaña para conseguirle los medicamentos y los tratamientos que necesitaba. Aunque lograron obtener los recursos, 350.000 pesos, fue poco lo que lograron hacer por salvarle la vida.
En testimonios entregados al canal TeleMedellín en días pasados, José Daniel manifestó que no sabía qué enfermedad tenía y en sus últimas presentaciones salía con unas sandalias y cubría sus pies con medias, ya que se le dificultaba ponerse los zapatos que complementaban su atuendo artístico.
Los movimientos del Muñeco Zed eran admirados por quienes recorrían el pasaje Junín. FOTO: YULIANA ZULETA VILLEGAS
“Me dan muchos cólicos, me tiembla la pierna en la pantorrilla, se me hinchan los pies, no puedo mantenerme mucho de pie”, le relató a este medio de comunicación en una de sus últimas presentaciones en Junín.
La última vez que se supo de él fue hace 20 días. “No tenía cédula, ni correo electrónico, ni cuenta bancaria; no tenía celular, absolutamente nada. La única manera de encontrarme con él era en las calles, en Junín, esa vez que hablamos me dijo que tenía mucho miedo de morir solo”, dijo María Flor Orozco, gestora cultural y amiga de Peña
Vivía en una habitación en Ayacucho en el centro: allí tenía la cama, el maquillaje, la ropa y un bafle. No más. Vivía solo. Según Orozco, estuvo hospitalizado desde hace dos semanas.
“El domingo pasado fue la última vez que hablamos en la clínica y me dijo que estaba mejor, que estaba mejorando; le dije que mucha gente lo queríamos”, agregó.
El artista callejero nació en el departamento de Tolima y llegó a vivir a Medellín a los 15 años. Desde ese momento se dedicó a hacer arte en las calles.
Sus movimientos, tal como si fuera un maniquí robotizado, eran admirados por todos los que recorrían este sector de la ciudad, el cual ocupó durante 20 años, luego de llegar desde el Tolima. Ahora son recordados con nostalgia, aunque su ausencia ya se había sentido desde finales del año pasado, cuando apenas pudo presentarse en un par de ocasiones por cuenta de su convalecencia.
Su imagen era muy peculiar, desde su maquillaje, ya que a primera vista daba la sensación de ser un muñeco, con sus pantalones, camisas de colores, tirantes y zapatos. “Los movimientos que hacía eran únicos, no creo que alguna persona los pueda imitar. Era un personaje único y muy querido en Medellín”, manifestó uno de los comerciantes de este pasaje.
Su vena artística la tuvo desde joven, en un municipio de su Tolima natal, donde participaba en actividades. “Desde el colegio siempre me destaqué por participar en todo, ahí fue que descubrí que tenía el talento para ser artista. En lo que más participaba, era en concursos de baile y teatro”, le manifestó a Q’hubo el 11 de julio del año pasado.
Su último adiós está previsto para las 4:00 de la tarde de este miércoles en el centro de Medellín, donde se planea rendirle un homenaje lleno del arte y de los aplausos que dejó de recibir por su enfermedad y con el cual recordarán la alegría que le dio al centro de Medellín durante dos décadas.
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