Un juez de Ejecución de Penas de sentencias de Justicia y Paz ordenó la libertad, a prueba, del exjefe paramilitar Rodrigo Pérez Alzate, alias “Julián Bolívar”, por cumplir la pena de ocho años de prisión que le fue impuesta en el marco del proceso de Justicia y Paz, al que se sometió luego de dejar las armas.
El juez otorgó la libertad para el desmovilizado, quien está recluido en la cárcel de Itagüí, para lo cual Pérez Alzate deberá suscribir un compromiso de buen comportamiento y acatamiento de la justicia.
Ante la decisión judicial, ahora corresponde a los fiscales de Justicia y Paz revisar si el beneficiado tiene otras cuentas pendientes con la justicia, tal y como ha sucedido con otros exjefes paramilitares que han recibido decisiones similares y no lograron recuperar su libertad por procesos pendientes en despachos judiciales.
“Julián Bolívar”, sobre quien pesa una orden de extradición, continuó con su pena en Colombia luego de que el presidente Juan Manuel Santos, el pasado 12 de febrero, suspendiera su traslado a Estados Unidos, tal como lo había aprobado la Corte Suprema de Justicia, al dictar sentencia sobre las pruebas que habían presentado para su extradición.
“Julián Bolívar” era requerido por 21 cargos relacionados con tráfico de estupefacientes desde Colombia hacia Estados Unidos. La Corte indicó en su momento que si bien ya había sido juzgado por delitos conexos al narcotráfico en Colombia, la justicia estadounidense lo solicitaba por haber participado en toda la cadena de producción y envío de drogas.
Pérez Álzate, quien fuera jefe militar del bloque central Bolívar de las exAuc, nació en Medellín, el 24 de mayo de 1962. Delinquió en zonas rurales y urbanas los municipios mineros del Nordeste antioqueño y el sur de Bolívar, así como en Santander y Cundinamarca, entre los años 1998 y 2005, aliado con los bloques de autodefensa de Carlos Mario Jiménez, alias ‘Macaco’.
Según investigaciones de las autoridades, alias Julián Bolívar, fue involucrado como autor material o intelectual en más de 20 masacres en contra del sindicato de conductores y trabajadores de la industria del transporte en Santander, Sincotrainder, y la Unión Sindical Obrera, USO, que dejaron más de 77 personas muertas y un número indeterminado de desaparecidos. Además de hechos similares en el Nordeste antioqueño y el sur de Bolívar, donde libró una guerra a muerte contra las Farc, el Eln o sus supuestos colaboradores.
En otras investigaciones se le relaciona con un episodio ocurrido en el área metropolitana de Bucaramanga, donde nueve personas murieron y otras fueron secuestradas, en zonas de invasión de los barrios El rincón de la Paz y Convivir, municipio de Girón.