No es sorpresa que las calles de Sabaneta estén atestadas este mes. Imponentes figuras y luces que cuelgan de los árboles engalanan el parque principal de esa localidad. Cerca de dos millones de bombillas LED integran su alumbrado navideño, cuestión que ha resultado en que puñados de familias, con sus niños y mascotas, se vayan a casa con su tradicional fotografía de Navidad.
Aunque a uno que otro se le olvida el tapabocas —protocolo que no se debe desechar—, las risas de los niños, los globos de helio y los algodones comestibles, además de las luces, han hecho de ese lugar un parque de diversiones. Música, bombillas intermitentes y vendedores de todo tipo de entretenciones reinan este diciembre en el municipio más pequeño de Colombia.
Un árbol verde, de unos ocho metros de altura, se yergue, repleto de estrellas, como atractivo central del parque principal. Y aunque es poca la natilla que se vende en los alrededores, no faltan los tradicionales buñuelos sabaneteños, que deleitan paladares en cualquier mes del año, y que en este, en especial, se persiguen más.
Además del parque y sus calles vecinas, el parque de los Cuatro Elementos, los principales corredores viales, las glorietas y las cinco capillas del municipio se revisten de más de 5.000 metros de mangueras y 20.000 toneladas de aluminio. “Sabaneta se viste de esperanza” es la temática que se encontrará quien decida pegarse la rodadita hasta este punto del sur del Aburrá.
La oferta no se limita a las luces, que se encienden desde las 6:00 de la tarde hasta la 1:00 de la mañana. Este año se instalaron atracciones mecánicas gratuitas, como un carrusel y una casa mágica, donde Papá Noel ayuda a los niños a elevarse por los aires del parque principal.
Solo un mal aqueja a quienes se deciden por este destino: la congestión, tanto de peatones como de carros. Llegar en carro hasta los sectores iluminados puede terminar siendo un viacrucis, aunque sea contraria la figura católica que se celebra esta Navidad. Así que la recomendación es usar el transporte público porque tampoco es fácil encontrar dónde parquear.
En todo caso, la opción de visitar este municipio está en la ruta de alumbrados del Aburrá. Las luces se encenderán hasta mitad de enero, entonces, si no alcanza a tomarse la foto en diciembre, lo puede hacer en enero, cuando lleguen los reyes magos. ¡Todavía hay tiempo!