El olor concentrado que provenía de un apartamento y exasperó a los vecinos, en una urbanización residencial del centro de Medellín, llevó a las autoridades al hallazgo de una fábrica de mecato marihuanero.
La Policía reportó que el caso ocurrió en el barrio El Chagualo, donde la queja ciudadana condujo a una patrulla hasta la fuente del aroma, en la carrera 55 con la calle 65. Al ingresar al recinto, los uniformados encontraron a cinco personas, que dijeron ser universitarias, en una dinámica de aparente culinaria.
Sin embargo, al revisar en detalle lo que hacían, se percataron que estaban mezclando estupefacientes “con alimentos como pasteles, chocolates y gomitas”, indicó el reporte oficial. Cuatro hombres de 19, 20, 24 y 27 años fueron detenidos, al igual que una mujer de 24, quienes tendrán que responder por cargos de fabricación y porte de estupefacientes.
“Estaban en una cocina domiciliaria de estupefacientes”, remarcó el coronel Iván Santamaría, comandante Operativo de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, añadiendo que los envolvían “en paquetes atractivos para enviciar a los menores de edad”.
La teoría policial es que el mecato marihuanero estaba dirigido a los consumidores infantiles y adolescentes, “para iniciarlos en el peligroso mundo de las drogas y convertirlos en adictos y potenciales clientes. Los públicos para la venta son los entornos educativos”, prosiguió el documento.