Que quienes estén acusados de violencia sexual contra menores de edad no puedan recibir ningún beneficio como libertad condicional, redenciones de penas así el delito haya sido cometido en el contexto del conflicto armado, es el objetivo de la reforma constitucional que en la noche del lunes cursó su primer debate en el Congreso de la República.
Aunque parece que la iniciativa cuenta con las mayorías, ya que este fue un reclamo cuando se estaba creando la institucionalidad de la Jurisdicción Especial para la Paz, no todos están contentos.
Por ejemplo, la senadora Paloma Valencia, del Centro Democrático, no votó la iniciativa pese a que es un proyecto del Ejecutivo y el ponente es su compañero de bancada Santiago Valencia, y explicó que “yo no voy a votar el proyecto que impide que para el futuro los delitos sexuales sean tratados en justicia transicional, por la aceptación de que no será aplicable a las Farc. Por mi parte buscaré la manera para que los violadores de niños, los pederastas, paguen penas”.
Y es que como lo dijo el ponente, “claramente esto aplica hacia futuro y lo que busca es evitar el error que cometimos con las Farc, que todo el que viole a los niños como ocurrió en la guerrilla pague la misma pena a la que están condenados Rafael Uribe Noguera (violador y asesino de Yuliana Samboní, condenado a 58 años de prisión) y Luis Alfredo Garavito (violador y asesino de al menos 172 menores de edad, condenado a 40 años de cárcel), sean grupos de extrema derecha o de extrema izquierda, porque aquí no tenemos diferenciación”.
Agregó el parlamentario: “lo que queremos es justicia y prelación en los derechos de los menores de edad”.
Al respecto, el senador Carlos Antonio Lozada, del partido Farc, señaló que “no se le puede mentir al país porque este proyecto lo que busca es otra cosa, en el acuerdo de paz quedó claro cuáles delitos no serían amnistiables. En el reglamento de la Farc se estipulaba el fusilamiento para quienes cometieran delitos sexuales. Lo que señala este proyecto es que se quiere utilizar la niñez para destruir el proceso de paz”.