Actualizar o profundizar los conocimientos en un área específica y fortalecer las competencias gerenciales dejaron de ser un valor agregado para una persona en el mundo laboral.
Actualmente las universidades del país, según el Sistema Nacional de Información de la Educación Superior (SNIES), ofrecen 5.859 posgrados, sin contar técnicos o tecnólogos, de los cuales 2.964 son especializaciones universitarias, 530 especializaciones medico quirúrgicas, 2.003 maestrías y 362 doctorados.
Solo en Antioquía, hay 1.051 programas de este tipo —cerca del 20 % del total de la oferta a nivel nacional—, con 620 especializaciones universitarias y medico quirúrgicas, 314 maestrías y 75 doctorados.
Los costos de estos programas varían entre los $10 y $43 millones, según sea el tipo de posgrado y la universidad que lo oferte; y su duración también está sujeta a la categoría del programa, si es especialización, por ejemplo, tiene un tiempo estimado de un año, las maestrías, hasta dos años, y los doctorados entre cuatro y cinco años.
Pero, más allá de estos indicadores que explican el diagnóstico de la educación posgradual en Colombia, respecto a tipos de programa, costos y duración, es importante tener en cuenta unos consejos prácticos antes de tomar la decisión de matricularse en un programa de este tipo.
Es clave, por ejemplo, saber en qué momento estudiarlo, conocer qué dedicación de tiempos exige y cuáles son las diferentes opciones de financiación para costear sus matrículas, entre otros.
Tenga en cuenta
Ángela Gallón, jefe de la Oficina de Mercadeo de la Universidad CES de Medellín, afirma que entre las principales dudas que surgen al momento de elegir estudiar un posgrado se destacan aquellas que giran alrededor de la organización del tiempo y el dinero que se debe destinar para hacer este tipo de cursos.
Con relación a los tiempos, esta formación se ofrece por lo general en las noches en días entre semana, especialmente pensando en la disponibilidad de horarios de las personas que trabajan, o los sábados durante todo el día.
Los costos varían según el tipo de programa, si es especialización puede estar entre los $10 y $25 millones, maestría de $30 a $45 millones, y doctorados, incluida la tesis, más de $100 millones. Estos valores son válidos solo en universidades privadas.
“Otra duda que surge es si lo que se quiere estudiar es una especialización, maestría o doctorado. “La primera, profundiza sobre un tema específico y exige menos tiempo; la segunda, amplía conocimientos en un campo profesional determinado, brindando herramientas y nuevas competencias, pero tiene mayor duración; y la tercera, forma investigadores capaces de gestionar la información y crear conocimiento científico en función de responder problemas”, explica Gallón.
Según la especialista, también es recomendable antes de tomar la decisión de estudiar un posgrado contar con alguna experiencia laboral. “Esto da mayor conocimiento y certeza al elegir el tipo de programa, no solo para aplicar los conocimientos adquiridos, sino por el gusto y la pasión que genera actualizarse o profundizar en un área específica”, indica.
De otra parte, Gabriel Jaime Arango, director de Formación Integral de la Universidad Eafit, aconseja al interesado analizar si esta formación realmente responderá en contenido y calidad a las necesidades y expectativas de desarrollo profesional que se tiene. Como explica, “es frecuente que se presenten dudas sobre las capacidades intelectuales y competencias con las que se cuenta para responder a las nuevas exigencias académicas; sobre las técnicas de estudio que se tendrán que aplicar para que el posgrado no se convierta en un dolor de cabeza; y sobre la adaptación que se tendrá que hacer para ajustarse a las condiciones de evaluación del aprendizaje impuestas por el método del programa”.
Según Arango, con esta información clara y resuelta, la persona contará con las bases de confianza y de seguridad necesarias para realizar esta ruta de formación con éxito. “Tener dudas es normal, pero no deberían ser nunca un impedimento para decidir estudiar un posgrado”.
Consulte por la financiación
Para Rodrigo Riaño, vicerrector de la Universidad La Gran Colombia, hoy las universidades tienen centros de experiencia o de atención al estudiante muy bien organizados y allí todos los interesados, casi de manera inmediata, pueden conocer las diferentes opciones de financiación que se tienen —suelen ser las mismas en todas las instituciones— y tener mayor información sobre las posibilidades de ser beneficiarios de dichos créditos. “Más interesante es la opción de revisar opciones de becas, pues hay muchas para estudiar en el extranjero que en ocasiones se pierden por desconocimiento o por considerar que están diseñadas para unos pocos. Es muy importante estar atentos a la información, por ejemplo, del Icetex, Fullbright, Fundación Carolina y Colfuturo, entre otras”, asegura Riaño.
Para tener en cuenta, también se pueden solicitar créditos a mediano o largo plazo con intereses que actualmente no están por encima del 1,3 o 1,4 mes vencido, o pagarle directamente a la universidad una mensualidad con intereses aún más bajos.
Para destacar, en Medellín se encuentra Sapiencia, una de las mejores opciones de financiación para hacer este tipo de estudios.