En 179 municipios de 15 departamentos del país durante 2012 se vertieron 205 toneladas de mercurio al suelo y al agua, de las cuales el 27,5 por ciento corresponden al uso de la minería de plata y 72,5 por ciento a la minería de oro. Se conoció también que en Colombia son transportados cada año más de 300 millones de toneladas de sedimentos, siendo el mayor aportante el río Magdalena.
Estas son algunas de las conclusiones a las que llegó el Estudio Nacional del Agua 2014, un informe técnico-científico, que reconoce el estado y la dinámica del agua en el país. De acuerdo con el Ideam, con este estudio se identificaron las subzonas hidrográficas y cuencas que se deben priorizar, para mejorar la gestión sobre el recurso hídrico por sus vulnerabilidades, presiones por uso y afectaciones a la calidad.
El ministro de Ambiente, Gabriel Vallejo, resaltó que “más que una voz de alerta, el estudio lo que plantea son enormes retos que se deben emprender para preservar el agua de los colombianos”.
El director del Ideam, Omar Franco, destacó tres aspectos del estudio que deben servir —según él— para emprender acciones inmediatas que contribuyan a preservar el agua como la educación ambiental, los sedimentos en los ríos del país y la planeación en el abastecimiento del recurso hídrico para los sectores productivos.
“En las regiones hidrográficas Magdalena-Cauca y Caribe se debe iniciar un proceso serio de educación y cultura al uso del agua. Entendemos que son las regiones más vulnerables al recurso hídrico. En esas dos regiones se concentra el 80 por ciento de la población”.
Otra de las conclusiones a las que llegó fue que 300 millones de toneladas de sedimento se transportan anualmente por los ríos del país. “Esta es una cifra que nos debe preocupar porque a través de la producción de sedimentos perdemos la posibilidad que los ríos y los cauces tengan condiciones normales. Vamos a registrar más desbordamientos e inundaciones y eso nos tiene que llamar la atención. También nos debe llamar la atención que casi 11 millones de personas pueden estar en un alto riesgo de vulnerabilidad por desabastecimiento en la medida en que la fuente de donde se están abasteciendo tiene problemas”.
En ese sentido, entre las conclusiones del estudio, se destacó que 318 municipios pueden presentar problemas de desabastecimiento en épocas secas lo cual podría afectar una población de aproximadamente 11.530.580 habitantes entre las cuales se destacan Chiquinquirá, Paipa, Floresta, Soracá, Manzanares, Yopal, Neiva, Maicao, Santa Martha, Buga, Palmira entre otras.