El Pacto Histórico, la coalición que aglutina a un robusto sector de la izquierda política, está a la espera de las elecciones del próximo 13 de marzo, que le permitirán medir cuál será su peso en el Congreso.
Iván Cepeda, integrante de la lista al Senado de esa coalición, habló con EL COLOMBIANO sobre las diferencias internas que han presentado de cara a la consulta presidencial, su propuesta de una renta básica universal, la posible alianza del Pacto Histórico con el Partido Liberal y los líos judiciales de Piedad Córdoba.
Recientemente, se les preguntó a los candidatos presidenciales del Pacto Histórico si consideraban que en Colombia había democracia. Todos contestaron que no. ¿Usted qué piensa?
“De ninguna manera es aceptable la tesis de que Colombia tiene una democracia plena, sólida y de las más tradicionales. Ese mito de la Colombia democrática es eso, una ficción. Colombia es un país con una muy débil democracia, que en algunos sentidos es simulada y simulatoria. Y en otros sentidos, absolutamente formal. Así que mi respuesta es que Colombia es una democracia en crisis, profundamente débil.
Petro lo ha dicho muchas veces, nosotros defendemos la Constitución de 1991. No somos fuerzas que estén en contra de la Constitución, ni contra la institucionalidad democrática, para salirle al paso a la idea de que los candidatos presidenciales dijeron que queremos imponer un régimen chavista venezolano”.
¿Con quién va usted en las consultas presidenciales del próximo 13 de marzo?
“Mi partido, el Polo Democrático ha avalado la candidatura de Francia Márquez, que es una candidatura que podría considerarse como un fenómeno político novedoso en estas elecciones. Su candidatura es inédita en el país. Es tal vez la primera vez que una lideresa social, que proviene de los territorios llega a una candidatura tan clara, con unas tesis y una figuración tan importante”.
¿Pero usted la está apoyando en la consulta?
“Por su puesto, vamos a votar por Francia Márquez en la consulta”.
¿Qué opina de que Petro diga que el segundo en la consulta no necesariamente va a ser la fórmula vicepresidencial?
“Lo que considero es que en las lides políticas siempre hay ese tipo de discusiones. Son normales y no hay que hacer de ellas un escándalo, como si se tratara de hechos inéditos. A mí modo de ver es normal.
Pero nosotros, como Polo Democrático, ya hemos sentado una posición como partido. Consideramos que si Francia Márquez llega a ocupar el segundo lugar de la consulta, debe ser la candidata vicepresidencial. Obviamente, como se trata de una coalición, habrá un debate que encontrará algún tipo de solución.
El Polo en un momento planteó la lista abierta, pero se impuso una votación mayoritaria de un colegio electoral que la lista fuera cerrada”.
A Francia Márquez ya le habían incumplido acuerdos en el pasado, cuando estaban armando las listas al Congreso. ¿No considera que esto podría convertirse en un nuevo incumplimiento?
“Yo diría que no hay que apresurarse a dar por sentado hechos que no han ocurrido. Sí hubo un incumplimiento con relación a la lista al Senado. Eso es importante decirlo, lamentarlo y condenarlos.
Ahora bien, ¿a qué obedece esa circunstancia? A que sí, hubo una gravísima equivocación y una puja en la cual lamentablemente un renglón importante que debía ser otorgado a Soy porque somos -el movimiento de Francia Márquez-, no se dio. Eso es un asunto del cual yo personalmente me siento entristecido y avergonzado. De ahí a decir que va a haber un nuevo incumplimiento, está por verse. Habrá una discusión muy fuerte en el seno del Pacto Histórico”.
¿Qué opina de la posibilidad de que sea el Partido Liberal el que se quede con esa fórmula vicepresidencial?
“Frente a ese tema todavía no hay una decisión tomada, ni el Pacto Histórico, ni en el Partido Liberal. Yo coincido con Camilo Romero en que nuestro primer pacto es con las bases del liberalismo. A ellos y ellas va nuestro discurso. Ya hay personas y líderes políticos que representan al liberalismo y han sido bienvenidos.
Un pacto con el Partido Liberal es un asunto que va a ser objeto de una discusión a fondo, porque lo que no estaríamos dispuestos a aceptar es una de esas tradicionales componendas burocráticas. Yo soy consciente de que el Pacto Histórico no puede aspirar a gobernar solo este país.
Hay que plantearse una muy fuerte alianza, un bloque histórico para sacar adelante el futuro de la nación. Yo creo que en eso hay que abrirse a las posibilidades de un diálogo programático y no burocrático sobre alianzas políticas”.
¿Qué tipo de proyectos de ley impulsaría la bancada del Pacto Histórico de llegar al Congreso?
“Ya tenemos un diseño de un plan de choque. El 20 de julio de este año vamos a entrar al Congreso con un paquete de iniciativas legislativas para afrontar algunos de los problemas más graves que tiene el país. El primero, que es obvio, es que hay que reformar el Congreso. Esta no es un escoba nueva para decir que barre bien. Tenemos la misma escoba vieja y hay que cambiarla. Eso tiene que ver con una baja de salarios, un control eficaz de qué hace cada congresista en su tiempo laboral y también con eliminar la Comisión de investigación y Acusación de la Cámara de Representantes, que no sirve para nada.
También existe la necesidad de un plan para atender la gravísima crisis social del país, en esto habrá iniciativas, como la renta básica universal, que son de urgente trámite. No vamos a lanzar propuestas que no tengan un reemplazo, somos conscientes de la situación fiscal del país. Si ponemos en un lado, tendremos que quitar de otro. Seguramente habrá reforma tributaria, habrá que rediseñar el Presupuesto General de la Nación”.
Recientemente, a Piedad Córdoba, que también es candidata al Senado del Pacto Histórico, se le ha señalado de supuestamente tramitar la liberación de secuestrados con fines políticos. Usted, que también ha trabajado en temas de paz, ¿qué piensa frente a esas acusaciones?
“Yo hice parte del grupo de colombianos y colombianas por la Paz y estuve participando con Piedad en las liberaciones que se dieron entre 2008 y probablemente 2010, así que me constan las circunstancias en las que ese trabajo se dio. Me parece inaceptable que se intenten presentar esas operaciones humanitarias como una especie de estrategia electoral de la entonces senadora Piedad Córdoba. No, de ninguna manera, esas fueron operaciones humanitarias auténticas que se dieron en condiciones muy adversas.
En ese momento las Farc tenían posiciones supremamente duras. Por ejemplo, no estaban dispuestas a liberar a los ciudadanos estadounidenses que estaban en su poder si no se liberaban a cambio a Simón Trinidad y a ‘Sonia’. Había puesto una condición muy difícil, como también pasaba con otras personas. Entonces, ahí hubo que hacer un trabajo, que hizo en parte Piedad para convencer de que se dieran esas liberaciones”.
¿No considera que Piedad Córdoba debería renunciar al Pacto Histórico para responder por los líos que tiene en la Corte Suprema de Justicia?
“Piedad tiene que responder ante la justicia. Lo está haciendo, tiene una abogada y está concurriendo a los requerimientos que le hace la justicia. No puedo decir nada distinto a lo que he dicho también frente a mi caso. Estamos listos, y debe estar lista ella, para responder ante los órganos judiciales.
¿Por esa circunstancia debería renunciar a la lista del Pacto Histórico? Si fuera así, yo creo que el abanico de candidatos de todos los movimientos políticos quedaría despoblado. Son, tal vez, contados con los dedos de la mano quienes se presentan a una elección y no tienen procesos de investigación ante algún órgano.
Es propio en el ejercicio político en Colombia que se hagan interpelaciones judiciales e investigaciones. En este caso el asunto es afrontarlas y tener el comportamiento de responder ante la justicia. Y no salir corriendo del Senado a buscar otro juez que les sea más benigno, como han hecho algunos”.