La entrada oficial de Alejandro Gaviria a la contienda electoral —que se confirma hoy a las 7:00 a.m.— plantea de entrada una pregunta: ¿qué tanto puede unir él al centro de cara a las elecciones de 2022? Hace tres años, en los comicios presidenciales de 2018, dos precandidatos que se ubican en este espectro político alcanzaron 4’988.876 votos, pero se lanzaron por separado y ninguno pasó a segunda vuelta.
De haberse unido en esa ocasión, Humberto de la Calle (399.180 votos) y Sergio Fajardo (4’589.696 votos) habrían superado la votación de Gustavo Petro (4’851.254 votos) y llegado a segunda vuelta para enfrentarse a Iván Duque, el candidato del uribismo que alcanzó 7’569.693 votos.
Y hoy el panorama no es muy diferente. Aunque De la Calle y Fajardo hacen parte de una alianza (la Coalición de la Esperanza), el centro no tiene aún consolidada la posibilidad de unirse en torno a una candidatura única, tanto así que son 11 sus precandidatos cantados.
Al lanzarse oficialmente al ruedo para llegar a la Presidencia, este miércoles Gaviria se convierte en el número 11 en la lista de precandidatos que quieren conquistar el voto de este espectro político y que se concentra en cuatro bloques: la Coalición de la Esperanza, la Alianza Verde, el Nuevo Liberalismo, y Gaviria como independiente (ver gráfico).
Este arribo del exministro de Salud de Juan Manuel Santos, quien ha dejado la puerta abierta a hacer una alianza, representa un reto: unir el mapa político de los precandidatos que ya tenía este sector: Carlos Amaya, Humberto de la Calle, Juan Fernando Cristo, Sergio Fajardo, Juan Manuel Galán, Rodrigo Lara, Sandra Ortiz, Jorge Enrique Robledo, Camilo Romero, y Antonio Sanguino.
Sin entrar formalmente a la contienda, Gaviria figuró en intención de voto en la encuesta de agosto de Invamer. En dicho sondeo sobresalieron Fajardo (segundo con 14,5 %), Galán (cuarto con 10 %), De la Calle (séptimo con 4 %), Gaviria (onceavo con 2,6 %), y Robledo (doceavo con 0,9 %).
Para Carolina María Horta Gaviria, docente de la facultad de Ciencias Políticas de la UPB, la llegada del exministro no pasará desapercibida y podría representar una oportunidad para que el centro, en lugar de dividirse, contemple la posibilidad de una gran alianza. “Al centro no le alcanzó para ganar las elecciones en 2018 por falta de alianzas, pero en 2022 puede ser diferente”, precisó.
Un centro fragmentado
Al mirar hacia la competencia que hay hoy entre precandidatos del centro se evidencia lo que sería una fragmentación en los apoyos. Ese es el caso de la Alianza Verde, en la que algunos de sus líderes políticos han manifestado su intención de irse con Gaviria y otros con la propuesta de Fajardo.
Una de las figuras que manifestó su apoyo público a Gaviria fue la representante a la Cámara Juanita Goebertus, quien aseguró que se ve representada por su propuesta y planteó que es importante tomarse un tiempo para oírlo.
“Yo apoyé la candidatura de Sergio Fajardo en 2018, pero hoy veo una opción en Alejandro Gaviria que ayuda a canalizar ese deseo de cambio. Creo que Alejandro no entrará a dividir y entrará a buscar un proceso de unión por medio de una consulta en marzo con la que se definirá un candidato único del centro”, le dijo Goebertus a este diario.
Por otra parte, la senadora Angélica Lozano ha mostrado su apoyo permanente a la posible candidatura de Fajardo, pero reconoció que el arribo de Gaviria a la contienda ampliará el debate del centro y las opciones de elección. En ese sentido, señaló que solo ve viable una alianza a través de la Coalición de la Esperanza para unir sus fuerzas políticas.
A su turno, el precandidato ‘verde’ Antonio Sanguino, señaló que espera que la precandidatura de Gaviria confluya en la Coalición de la Esperanza. “Si él se suma a la Coalición fortalecerá al centro y lo consolidará como una opción viable de ganar las elecciones presidenciales, si no lo hace tendríamos un efecto contrario. Las elecciones de 2022 no son elecciones para llaneros solitarios, tenemos que pensar en unirnos”, expuso.
Además, Sanguino le detalló a este medio que junto a Amaya y Ortiz buscan definir un candidato único que represente a su partido en la Coalición. A pesar de ese plan, la Alianza Verde no tiene claro todavía si apoya a esa alianza o a la que lidera Gustavo Petro (el Pacto Histórico), ya que, por ejemplo, Romero se ve en una coalición con esta última. Ante ese panorama, ese partido hará una consulta interna y encuestas, para tomar una decisión el 15 de septiembre.
Lo cierto es que hay tantas opiniones divididas en los ‘verdes’ que están contemplando una escisión, mecanismo con el cual se permitiría que los integrantes de la colectividad decidan si apoyan al Pacto, a la Coalición o a Gaviria, que hoy es independiente.
Despierta amores y ‘odios’
La división de apoyo electoral no solo está presente en los ‘verdes’, pues al interior de la Coalición de la Esperanza hay posiciones divididas sobre la posibilidad de recibir en sus filas a Alejandro Gaviria.
Mientras De la Calle, Cristo, Fajardo y Galán han mostrado su apoyo al ingreso del precandidato de ‘Colombia Tiene Futuro’, Robledo mostró su oposición y marcó distancia criticando la gestión de Gaviria al mando del Ministerio de Salud entre 2012 y 2018.
“Su Ministerio de Salud fue de lo peor, no puedo verme en el mismo proyecto político con él”, dijo en su momento Robledo, pero posteriormente la colectividad aseguró que podría discutir el ingreso de Gaviria, solo si él demuestra que quiere unirse al proyecto político e ir a la consulta.
A pesar de esta postura crítica, los otros cuatro integrantes de esa Coalición aseguran que la puerta está abierta a la posible entrada de Gaviria, precisamente en esa búsqueda de unión para ir a una consulta y definir el candidato único en marzo de 2022.
La otra fuerza política que se destaca en el centro es el Nuevo Liberalismo, partido que recuperó su personería jurídica el pasado 5 de agosto y que tiene a Galán y Lara como precandidatos actualmente.
Galán le aseguró a EL COLOMBIANO que está firme en su intención de hacer parte de la Coalición y desestima que tome un camino apartado de ellos, por lo que descartó una candidatura en solitario para las elecciones presidenciales.
“Mi intención sigue en ir a la consulta con la Coalición de la Esperanza en representación del Nuevo Liberalismo, como una muestra de unidad del centro para 2022. La entrada de Alejandro Gaviria a la contienda puede sumar al debate del centro. Su propuesta, como la de la Coalición, se aleja de los extremos políticos. Si él se ve representado en nuestro proyecto, debe manifestarlo y se tomará una decisión”, apuntó Galán.
¿La unión es el camino?
En medio de esa discusión, Gaviria ha manifestado que no llegará a dividir, por lo que asegura que, por el contrario, está dispuesto a acercarse para hacer uniones ya que cree que la “campaña no es un asunto de personalismos”.
Para la docente Horta Gaviria, si el centro no logra definir una gran alianza y definir un candidato único en marzo, se repetiría el escenario de 2018, en el que no lograron llegar a la segunda vuelta y fueron superados por el candidato de la izquierda (Petro) y el de la derecha (Duque).
Por ahora estos cuatro bloques del centro hoy están haciendo campaña por separado y de forma atomizada, pero persiste de forma generalizada la idea de lograr una gran unión, en la que Gaviria estaría dispuesta a hacer parte